Sergio Ramos emitió un comunicado a través de su cuenta de Twitter este sábado, tras las acusaciones de Football Leaks que apuntaban a un presunto dopaje por parte del capitán del Real Madrid tras la final de la Champions de 2017 que conquistaron ante la Juventus.

El jugador, que fue titular en Ipurua en el descalabro de los madridistas ante el Eibar, se ha posicionado rotundamente en contra del dopaje y ha anunciado que su equipo legal estudia emprender acciones legales contra la plataforma de filtraciones o quienes manchen su reputación.

Además, al termino del encuentro ante el Eibar, el capitán del Real Madrid confesó en zona mixta que hace poco más de un mes trataron de sobornarle con el asunto del presunto dopaje y que le pidieron dinero a cambio de silencio: "Ya sabemos qué tipo de portal es. Nos amenazaron hace un mes y medio. Quisieron sobornarnos con dinero. No teníamos ningún temor porque la verdad está de nuestra parte. Pero tomaré medidas, porque han querido manchar mi imagen y mi carrera. No cabe otra", dijo.

En el comunicado emitido, Ramos explica qué ocurrió realmente en los dos casos que Football Leaks cita:

En cuanto a la final de Cardiff 2017, Ramos asegura que recibió "un tratamiento médico pautado y administrado por los profesionales médicos del club. La cuestión quedó aclarada y resuelta entre las organizaciones por la vía escrita y formal".

Sobre la presunta irregularidad tras un partido de Liga en Málaga en abril de 2018: "Ante la premura de tiempo por el inminente viaje de regreso, el responsable de control permitió que me duchara, siempre en su presencia, y luego realizara el test que pasé favorablemente como en todas las ocasiones".