Cómo habrá sido el partido del Real Madrid en Ipurua que, pese a haber perdido 3-0 ante el Eibar, Thibaut Courtois fue el mejor de su equipo.

El meta belga fue salvador desde el minuto uno, evitando que la goleada y, por ende, el ridículo del conjunto blanco, fuera aún mayor. Desde el tiro envenenado de Escalante que servía como aviso en los primeros minutos y que se estrelló en el palo gracias a que las manos del salvador madridista rozaron lo suficiente la bola, hasta los últimos compases de partido, cuando el Eibar seguía intentando alargar la fiesta.

Con permiso de Benzema, que fue el único que propuso algo en el área del Eibar, Courtois fue de lo único salvable de un Madrid que firmó uno de los peores partidos de la temporada.

En el primer tanto armero hizo una buena parada, pero no logró quedarse el balón en propiedad, lo que aprovechó Escalante para abrir la lata. Y, pese a todo, no se le puede culpar a él.

Con este 3-0, el Real Madrid ya ha encajado 19 goles en lo que va de Liga, lo que supone el peor registro de la última década. Ensalzar la figura del portero en ese contexto se antoja un 'troleo', pero lo cierto es que, de no ser por Courtois, se estaría hablando de un descalabro de magnitud mayor.

En los micrófonos de beIN Sports, Courtois fue generoso con su defensa, que parece una sombra de lo que fue, y no repartió culpas. Eso sí, lanzó un mensaje muy claro: "Tenemos que defender con once". Una de las muchas asignaturas pendientes a las que se enfrenta Solari a partir de este domingo, con la vista puesta en Roma: "Lo bueno es que en tres días tenemos otro partido y la oportunidad de mejor la imagen", dijo Courtois. Optimismo.