Fútbol

Guerra total en el Sporting de Portugal tras la derrota en el Wanda Metropolitano

Gabi, del Atlético de Madrid, y William Carvalho.
EFE

La derrota del Sporting de Portugal en el Wanda Metropolitano (2-0), en la ida de cuartos de final de la Europa League, ha desatado una guerra total en el seno del club lisboeta. El presidente, Bruno de Carvalho, ha anunciado este viernes la suspensión de los trece jugadores que compartieron en redes sociales una carta contra el dirigente, que les había criticado con dureza. Algo que, como se comprueba, no piensa dejar de hacer: "Estoy harto de actitudes de niños mimados que no respetan a nada ni nadie, como por ejemplo a los aficionados. Creen que van lejos, pero esta vez se ha agotado mi paciencia para quien cree que está por encima del club y de cualquier crítica".

De Carvalho, que suele presenciar los partidos a pie de césped como un miembro más del cuerpo técnico de Jorge Jesus, no viajó esta vez con el equipo por motivos familiares. Tras la derrota, recurrió a Facebook para desahogarse: “Vivir un partido desde lejos cuesta mucho más, pero ver errores graves de jugadores internacionales y experimentados aún añade más sufrimiento”. El dirigente achacó al equipo “errores groseros” y aseguró que había jugado con nueve. No se cortó a la hora de dar nombres: “[Los centrales] Coates y Mathieu hicieron por los delanteros del Atlético lo que ellos no conseguían”, atizó. También criticó a Coentrao y Bas Dost por ver tarjeta amarilla, según él, para borrarse del partido de vuelta.

Falta de apoyo a la plantilla

Entre los suspendidos se encuentran el capitán Rui Patrício y jugadores importantes como William Carvalho, Bruno Fernandes o Rodrigo Battaglia. Los jugadores del Sporting lamentan la “falta de apoyo" por parte de quien, dicen, "debería ser" su "líder": "Apuntar con el dedo para culpar el desempeño de los atletas públicamente, cuando la unión de un grupo se rige por el esfuerzo conjunto, sea cuando sea la situación que estemos atravesando... todos los asuntos se resuelven dentro del grupo", afirman en la nota que ha motivado su castigo. "¿No hay otra forma seria de estar en el fútbol profesional que no sea esta?", se preguntan de forma retórica. "¡Somos profesionales, somos humanos! ¡Nuestra integridad y nuestro compromiso son sagrados! ¡Esfuerzo, dedicación, devoción y gloria siempre!", concluyen los jugadores.