La Fórmula 1 despide a Niki Lauda en Mónaco

La figura de Niki Lauda trasciende los números. Ni fue el piloto con más campeonatos del mundo de Fórmula 1, ni el que más victorias logró ni mucho menos el que más amigos se granjeó en el paddock. Sin embargo, su muerte se ha sentido mucho en el Gran Circo. Todas las escuderías, incluso las que apenas mantenían contacto con él más allá del de respeto a toda una leyenda de los monoplazas, y todos los pilotos le van a dedicar loas a una figura trascendental para entender lo que hoy es este certamen.

Mercedes será quien lleve la voz cantante, como es normal. En los entrenamientos libres que dominaron con mano de hierro este jueves (los viernes se dejan para cuestiones de márketing y diferentes eventos, como siempre en Mónaco), ya se vio que sus W10 contará con un detalle único: una pequeña estrella roja destacará sobre las grisáceas y plateadas que forman la trama sobre la carrocería de los coches de Hamilton y Bottas. Además, en el morro lucirá una firma de su exdirector no ejecutivo y las palabras 'Danke, Niki' (Gracias, Niki).

También Ferrari lucirá durante todo el fin de semana un recuerdo hacia el austríaco, que ganó dos de sus títulos mundiales al volante de sendos monoplazas de Maranello. Un escueto "Niki Lauda" subrayado con un crespón negro, en señal de luto, lucirá en los laterales de sus coches. Mucho más destacado es el homenaje que realizará Sebastian Vettel. El alemán ha rediseñado los colores de su casco para imitar el que llevaba Lauda en sus tiempos como piloto, junto a su nombre en la parte superior y en los laterales.

McLaren, aunque no está para presumir mucho después de una semana muy convulsa por lo sucedido en Indianápolis, también tendrá muy presente a la 'Rata'. Lauda ganó su tercer y último título en 1984 sobre Alain Prost por sólo medio punto, la menor diferencia de la historia. Ese año encuadrado en una corona de laurel y el escueto "Niki Lauda 1949-2019" se verá durante todo el fin de semana en los laterales de las tomas de aire superiores de los monoplazas de Norris y Sainz.

Haas, Toro Rosso, Red Bull... Todos llevarán mensajes de apoyo hacia un Lauda que, irónicamente, nunca se sintió a gusto en Mónaco: ganó dos veces, subió otras dos al podio, pero abandonó en siete ocasiones aquí.