El expiloto de Fórmula 1 Jaime Alguersuari dejó el mundo del motor en 2011 para centrarse en su otra pasión: la música. El catalán es DJ (con el nombre de Squire) y ahora prepara su autobiografía. En una entrevista en El Confidencial, revela que no tenía relación con Fernando Alonso y que no se sintió acogido por él.

"No había relación (con Alonso), hacíamos el protocolo: nos saludábamos, nos sacábamos una foto delante de las cámaras y hasta el próximo fin de semana", dice el barcelonés. "Yo no me sentí bienvenido por él. La única aproximación que recuerdo fue en Hungría, en mi primera carrera, que vino a darme la mano y a desearme suerte. Así como con Carlos Sainz me he llevado siempre superbien y en lo que he podido le he ayudado, con Fernando nada. Con Marc Gené y De la Rosa me llevo años, pero siempre fueron más cercanos, como el resto de pilotos", revela Alguersuari.

Sobre la Fórmula 1, Alguersuari dice que su salida de Toro Rosso fue "un robo, pero lo acepté y pasé página". Asegura que no tiene interés en acercarse de nuevo al mundo de la F1, donde dice tener pocos amigos: "Tengo mejores cosas que hacer (...). El odio, la venganza y el rencor no llevan a ningún sitio. Las personas que se portaron mal conmigo simplemente consiguieron hacerme mejor, más fuerte y capaz".

Alguersuari dice  que hay muchos pilotos que miran por encima del hombro a los demás, incluido él en su época: "Ahora miro declaraciones mías de hace unos años y me avergüenzo. Evidentemente yo no quería comportarme así, pero no sabía cómo gestionar algunas cosas y tenía que ser fuerte porque si no todo aquello me comía. Era un comportamiento necesario".

También revela que no ve Fórmula 1: "Es muy triste que por no disponer de un buen sponsor muchos pilotos de calidad se queden fuera, mientras que otros que no tienen ni la mitad de talento estén ahí, compitiendo simplemente porque traen unas cantidades que pueden cubrir una cuarta parte del presupuesto. Ya no veo Fórmula 1 por cosas así".

Sobre el independentismo en su Cataluña natal, dice que "me siento tan catalán como español". "He paseado las dos banderas con mucho orgullo por donde he ido y nunca he tenido un solo problema. Somos más fuertes y reconocidos siendo 45 millones de personas que seis, por lo que no apoyo la independencia. No me gustan los extremismos, ni de una parte ni de la otra, y lo que tenemos que hacer es esforzarnos por entendernos. Ojalá se pueda, hay familias que no se merecen estas enfrentadas por cosas así", asegura.