Adiós a Jaume Mir, el bigote protector del ciclismo que rodó con Clint Eastwood

  • El histórico auxilar, muy querido tras más de medio siglo en el pelotón, fallece a los 90 años.
Jaume Mir, en una película.
Jaume Mir, en una película.
Captura de imagen
Jaume Mir, en una película.

“¿Quién es ese hombre? Sí, ese, el del bigote”. La pregunta podía proceder lo mismo de un espectador que de un ciclista novato. Porque en el pelotón todo el mundo conocía a Jaume Mir, el protector de todos: ciclistas, periodistas, cámaras, guardias civiles... De todos. Siempre servicial, cariñoso y listo como el hambre. Un hombre querido por todos.

Mir, nacido en Barcelona y apodado ‘Taxi Key’, falleció este miércoles a los 90 años. Su enorme bigote ha acompañado al ciclismo durante más de medio siglo, desde los tiempos de Federico Martín Bahamontes hasta hace apenas cinco años. Con los colores y publicidades de equipos históricos como Bic, Kas, Teka y Festina, corría siempre a auxiliar a los corredores según cruzaban la línea de meta. No obstante, él siempre tenía dos mantas o dos bidones de agua: uno para los suyos y otro para cualquiera que lo necesitara.

Recuerdo la cronoescalada Ezcaray-Valdezcaray en la Vuelta a España de 1991. Yo me había obstinado en entrevistar al líder de la general, Melchor Mauri. Envueltos en frío y niebla, no veíamos nada. Crucé la meta sin darme cuenta de que por detrás de mí llegaba el mexicano Raúl Alcalá. Él me llevó por delante y yo me llevé a Mauri. Casi le mato. Mir le cogio en brazos y se lo llevó al autobús de Televisión Española. Daba igual que fuera de otro equipo, en este caso de la ONCE. En aquella etapa, tuvo tiempo de cuidar de los suyos, de llevar en brazos a Mauri, de preocuparse por mí y de consolar a mi hijo. Había venido a ver la etapa para celebrar conmigo su cumpleaños y allí estaba, llorando del susto al verme volar arrollado. Mir le regalo un maillot, un bidón y unos guantes.

Carrera en el cine

Siempre estaba pendiente del primero que entrara en la meta, aunque no fuera de los suyos. Primero, porque él quería y cuidaba a todos, pero también porque porque sabía que eso garantizaba una gran visibilidad a quienes le pagaban. Al acabar una gran ronda, había acaparado más planos que el líder de la general. Y él de planos también sabía. Lejos de la carretera, llegó a trabajar como actor en más de un centenar de películas, incluidas algunas porno. Aparece en ‘El Bueno, el Feo y el Malo’, el clásico ‘spaghetti western’ de Sergio Leone rodado en Almería con Clint Eastwood.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento