JJOO

Una España muy irregular

No era un buen comienzo olímpico para la selección española de balonmano, que se enfrentaba a los actuales campeones, Croacia.

Fue un partido irregular y en ocasiones alocado que los hombres de Juan Carlos Pastor perdieron (31-29) merecidamente, pues Croacia, pese a la baja de Balic, fue mejor.

El encuentro comenzó con igualdad, con goles por ambos lados, hasta el minuto 21, que marcó la brecha. La superioridad croata coincidió, paradójicamente, con la ausencia de su mejor jugador, Balic, un incordio para la defensa española. Ya al descanso, los nuestros perdían por cinco tantos (16-11). Por entonces, Iker Romer andaba desaparecido.

En la segunda parte cambiaron un tanto las cosas, Iker despertó, Hombrados logró controlar a Dzomba y España llegó a ponerse por delante (27-26). Pero una vez más, las imprecisiones y algunas decisiones arbitrales inclinaron la balanza en nuestra contra, hasta la derrota final (31-29).

No obstante, el resultado y el juego español invitan al optimismo. El martes ante Polonia (09.45, hora española), llegará otra ocasión de sumar la primera victoria.

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