Megan Rapinoe es protagonista allá por donde va. La capitana de la selección estadounidense de fútbol brilló en la ceremonia de entrega de los premios The Best 2019 de la FIFA, y no solo por conquistar el galardón a la mejor jugadora del año. La atacante fue una de las estrellas de la selección que conquistó el pasado Mundial femenino de Francia, pero también destacó fuera del césped, donde se convirtió en un referente de la lucha por la igualdad tras enfrentarse públicamente a Donald Trump.

Este lunes volvió a ganarse el aplauso de los aficionados de todo el mundo tras recibir el The Best en el escenario del emblemático teatro de la Scala de Milán, pues entonó un emotivo discurso cargado de agradecimientos y un final tremendamente emotivo con el que animó a sus compañeros de profesión a luchar por la igualdad.

“Entre las historias que más me han inspirado este año fue Raheem Sterling y Kalidou Koulibaly, hacen un gran trabajo en el campo, pero lo que han hecho al hablar del repugnante racismo que han enfrentado este año, pero lo más probable es que lo hayan sufrido toda su vida”, reconoció Rapinoe tras recibir el premio de manos del presidente de la FIFA, Gianni Infantino.

La capitana del combinado americano también recordó a la joven iraní que se prendió fuego porque no le permitieron ir a un partido, a Collin Martin, el único jugador de la MLS abiertamente gay "y a tantas jugadoras de la comunidad LGBTIQ que luchan cada día no solo para practicar el deporte que aman, sino para pelear contra la homofobia. Esas historias me inspiran demasiado, pero también me ponen un poco triste y decepcionada”.

Es por ello que señala el camino a seguir: “Siento que si queremos tener un cambio verdadero, necesitamos que no solo Sterling y Koulibaly, sino que todos estuvieran igual de molestos con el racismo como ellos. Si todos estuvieran igual de molestos por la homofobia como los jugadores de la comunidad LGBTIQ, si todos estuvieran igual de molestos por la falta de pago igualitario o falta de apoyo al deporte femenino y no solo las mujeres, eso sería una inspiración máxima”.

En este contexto, la jugadora aprovechó que el patio de butacas estaba repleto de grandes personalidades del fútbol para hacer una petición a sus compañeros de profesión: “Tenemos una gran oportunidad como futbolistas profesionales. Tenemos tanto éxito financiero y en otros sentidos, una visibilidad enorme. Le pido a todos los que están aquí, que ayuden a través de su visibilidad, apoyen al resto, compartan su éxito”.

Rapinoe recordó que “tenemos una oportunidad única que no tiene el resto de deportes y es usar este bello deporte para realmente cambiar al mundo. Es lo que les pido a todos, ojalá hagan algo al respecto con todo el poder que hay en esta sala", reivindicó.