El Real Madrid derrota al Atlético y se lleva un derbi al rojo vivo

Sergio Ramos toca un balón ante la presión de Álvaro Morata.
Sergio Ramos toca un balón ante la presión de Álvaro Morata.
EFE
Sergio Ramos toca un balón ante la presión de Álvaro Morata.

El Real Madrid se ha llevado el partido frente al Atlético de Madrid (1-3), en un choque lleno de polémica y que permite al equipo blanco adelantar en la tabla clasificatoria al equipo colchonero, situándose a cinco puntos del Barça antes del partido de los de Valverde frente al Athletic.

En el primer tiempo el Atlético de Madrid salió con mucha intensidad al terreno de juego, ejecutando una presión a todo el campo que puso en apuros al equipo blanco, que sin embargo respondió de forma bastante serena a esta circunstancia, sobre todo gracias a la velocidad de un VInícius que intimidaba a campo abierto.

El Real Madrid logró ponerse por delante en el minuto 16, en un córner en el que Ramos tocó la pelota y Casemiro logró marcar de tijera en el corazón del área, lo que hizo al equipo blanco serenarse bastante en su gestión de la pelota.

Sin embargo, y ya asentado en campo rival, el Atlético de Madrid consiguió poner el 1-1 en el minuto 25, en una acción que enfadó bastante al Real Madrid, ya que pudo haber falta de Correa sobre Vinícius, aunque el VAR consideró que no hubo tal, refrendando después que tampoco hubo fuera de juego.

En el minuto 42, el Real Madrid hizo el 1-2, de penalti, que anotó Sergio Ramos después de que el VAR confirmase la decisión del colegiado, que consideró que la falta se había realizado dentro del área, a pesar de las protestas del equipo colchonero, que estaban convencidos de que Giménez derribó a Vinícius fuera del área.

En la segunda parte siguió habiendo bastante polémica, y de hecho hubo dos jugadas que el Atlético de Madrid protestó de forma vehemente. La primera, un gol anulado a Morata por fuera de juego tras un gran movimiento de ruptura, que no subió al marcador tras ser revisado por el VAR, y un posible penalti de Casemiro sobre Morata.

El Real Madrid aguantó bien ese tramo de presión del Atlético de Madrid, y en el minuto 74 consiguió poner el 1-3 definitivo, después de un gran contragolpe definido por Bale tras un excelente pase de Modric. El galés, que había entrado por Vinícius, le dedicó un pitado corte de mangas al metropolitano.

El tercer tanto blanco hizo al Atlético de Madrid hundirse definitivamente, sobre todo tras la expulsión de Thomas por doble amarilla, que frustró definitivamente al equipo de Diego Pablo Simeone.

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