El Barça no ha podido pasar del empate en su visita a Mestalla (1-1), y ha cedido el liderato en un partido que los de Valverde han dominado en algún tramo, pero en el que no han terminado de imponerse a pesar de la buena reacción liderada por un Leo Messi al que se le acabó la gasolina en el tramo final del duelo.

El primer tiempo no pudo empezar peor para el Barcelona. En el minuto 1 el Valencia se puso por delante en un córner, en un despiste imperdonable de la zaga culé, que se olvidó de la marca de Garay y consiguió ponerse por delante. El gol dejó tocado al Barça, que recibió varios contragolpes a partir de ese momento.

Batshuayi, de hecho, tuvo dos buenas opciones de disparo que no entraron por poco, aunque la lesión de Guedes provocó que el Valencia comenzase a desplegarse mucho menos. El portugués tuvo que retirarse tras sufrir un problema en el abductor, lo que permitió al Barcelona hacerse con el control del juego.

A pesar de tener la pelota, es cierto que al Barcelona le costaba encontrar buenas situaciones de finalización, hasta que Leo Messi apareció para encender la luz. Fue una gran jugada individual del argentino, con pase a Suárez, devolución del uruguayo y remate del '10' al ángulo, imposible para Neto.

En el segundo tiempo, el Valencia buscó presionar un poco más arriba, lo que impidió al Barcelona jugar tan cómodo, aunque es cierto que eso tampoco produjo ocasiones claras, más allá de un remate de Gameiro con poco ángulo que no representó peligro para ter Stegen. El Barcelona merodeaba el área, y en el minuto 77 tuvo una ocasión clarísima, pero Coutinho se entretuvo y Gayá le quitó la pelota in extremis. Fue la última buena opción culé, que se dejó dos puntos y el liderato en el feudo valencianista.