Doce meses de coronavirus: y la realidad volvió a superar a la ficción

Una historia con principio, pero sin final a la vista

 

El jueves diremos adiós al año más extraño y difícil de nuestras vidas, aunque el virus que las puso patas arriba seguirá con nosotros un poco más. Ahora, cuando se cumplen 12 meses del argumento que toda película de ciencia ficción querría, toca echar la vista atrás. ¿Por dónde empezar? Por el principio: diciembre, Wuhan.

 

CAPÍTULO 1. UNA EXTRAÑA ENFERMEDAD  

 

Personal médico realiza controles en pacientes en el hospital Wuhan Fangcang, un centro improvisado para tratar a pacientes con coronavirus en la ciudad china de Wuhan.
Personal médico en el hospital Wuhan Fangcang, realizado en tiempo récord tras detectarse el virusen Wuhan.
EFE

La noticia es desconcertante: una "extraña enfermedad" afecta a la población china, un "misterioso virus" provoca fiebre alta y graves dificultades al respirar. Todo indica que se trata de una neumonía desconocida. No tiene nombre (aún). 

Solo hay una certeza: no se trata ni del virus del SARS ni del MERS, viejos conocidos. Este es novedad. China, inquieta, se mueve y reporta los casos a la OMS. Para el resto del mundo, ese virus con epicentro en un mercado de Wuhan no parece una amenaza real.

  

CAPÍTULO 2. ZONA CERO

 

Una enfermera distribuye medicamentos a pacientes en un hospital temporal situado en el gimnasio Tazihu en Wuhan, epicentro del coronavirus chino.
Una enfermera distribuye medicamentos a pacientes en un hospital temporal, epicentro del coronavirus chino.
EFE

Al menos 200 personas -que se sepa- tienen síntomas en menos de un mes en China. 50 terminan ingresadas. 7 están graves. Estos datos de enero son solo el principio, cada día van a más. El país asiático cierra el mercado de animales que considera el principal foco de contagio y reporta la primera muerte (o eso se creía entonces). Es 11 de enero y un nuevo coronavirus es el culpable. El contador echa a andar.   

España, mientras, asiste a la investidura de Pedro Sánchez, al 'culebrón' europarlamentario de Junqueras, al cambio de ministra a fiscal general de Dolores Delgado... El virus se ve aún lejos hasta que el 30 de enero la OMS declara la emergencia sanitaria mundial y el 31 llega a España, a La Gomera, en el organismo de un hombre alemán (luego se sabrá que no fue el primero). Aún así, tampoco prestamos mucha atención.  

  

CAPÍTULO 3. EXPANSIÓN 

 

Un operario del Mobile World Congress, con mascarilla, horas después de ser cancelado por la Covid.
Un operario del Mobile World Congress, con mascarilla, horas después de ser cancelado.
EFE

Llega febrero y, con él, otro caso en España. Esta vez, en Mallorca. Ya no se mira con tanto escepticismo al virus y una serie de hechos lo evidencian. Europa empieza a tomárselo algo en serio: Barcelona dice adiós a regañadientes al Mobile, Francia registra su primera muerte oficial e Italia aísla la zona norte. Ya no es un problema de China, es un problema mundial, y el virus encuentra en Italia su puerta de entrada a Europa. El país transalpino, cuya crisis se va expandiendo región a región, alerta: no es una simple gripe como nos repetían como un mantra; es algo más... y peor. 

El 25 de febrero el coronavirus toca la Península: una mujer italiana en Cataluña. Dos días más tarde, un periodista que cubrió el Atalanta-Valencia en Milán da positivo. Después de él, le siguen hinchas y otros compañeros de profesión. 

 

CAPÍTULO 4. NI OLOR NI SABOR   

 

Principios de marzo y solo se habla de una cosa: la manifestación del 8-M. ¿Es seguro asistir o no? La marcha se celebra sin mascarillas y con 600 casos de coronavirus en España -parecían pocos para un país de 47 millones de habitantes-.

 

Fotografía aérea de la Gran Vïa por el 8-M.
Fotografía aérea de la Gran Vïa por el 8-M.
JORGE PARÍS

Italia, a un suspiro de distancia, impone dos días más tarde una cuarentena total. Está desbordada: ya es el segundo país con más infectados en todo el planeta. La inquietud crece en unos días: España cierra colegios y universidades, celebra eventos deportivos a puerta cerrada y sus hospitales empiezan a notar la tensión. Ya hablan de saturación y de escasez de material.

Sala de Urgencias de La Paz.
Sala de Urgencias del Infanta Sofía, repleta.
JORGE PARÍS

El doctor Arribas, de la Paz, escribe un tuit alarmante: "Nos estamos quedando sin equipos de protección. Nos podemos quedar sin camas de UVI. Por favor, retuitea". La sombra del confinamiento acecha después de que la OMS declare la pandemia mundial el 11 de marzo y se hace realidad el viernes 13, el último día de vida 'normal'. 

El Ejército toma las calles tras decretarse el Estado de Alarma.
Un vehículo del Ejército en la Puerta de Sol, sin personas en la calle, tras decretarse el estado de alarma.
JORGE PARÍS

El Gobierno decreta el estado de alarma y se impone un mando único. Aquí comienzan miles de páginas del BOE y ruedas de prensa interminables. Hay 4.000 contagios y un número indeterminado de muertos. Quedarse en casa ya no es una prioridad, es una orden.

Dos días después, confinada como el resto de españoles, quien escribe estas líneas pierde por completo el olor y el sabor. Ocurrió un buen día, sin avisar. ¿A qué sabe la piña? ¿Y la pizza? A lo mismo: a nada. Entonces no se sabía, pero ese síntoma (que un gran porcentaje de personas desarrolla) era la carta de presentación del Sars-Cov-2, ese virus que cada vez tenía menos de gripe y más de letal. Como yo, miles. De repente, miedo.       

 

CAPÍTULO 5. Y LA VIDA CAMBIA  

 

La Gran Vía completamente vacía tras decretarse el Estado de Alarma en España.
La Gran Vía completamente vacía tras decretarse el Estado de Alarma en España.
JORGE PARÍS

Lunes, 16 de marzo. Primer día de teletrabajo obligado. En la calle apenas hay gente y, quien está, lo hace con temor: conductores, reponedores, dependientas... y los fotógrafos que retratan ese país fantasma, desierto, imborrable. Las ciudades se vacían mientras los hospitales se llenan. 

Las noticias que llegan desde allí son dramáticas: escasez (de EPIS), saturación (hospitalaria), bolsas de basura (como uniforme), respiradores (para unos pocos)... Se habla de enfermería de guerra y de triaje: tú sí; tú no. Los aplausos de aliento se escuchan todos los días a las ocho. Por ellos, los nuevos héroes, los que se exponen al virus sin apenas material.

 

 

Pasan los días y llega una fiebre (otra) la del papel higiénico y la de la harina, pero también la del "resistiré", los guantes y la de rociar todo con gel. La vida se divide en dos tiempos: el escritorio y el sofá.

De repente vivimos pegados al televisor, a las cifras, a la 'curva', a Fernando Simón (director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias), quien insiste: "¿Mascarilla obligatoria? No".

Mientras, miles de familias lloran amargamente alguna pérdida: la de una madre, un padre, un abuelo, una hija... Lo hacen en sus casas, solos. El virus arrebata hasta eso, el último adiós.

 

CAPÍTULO 6. RESIDENCIAS, IFEMA Y MORGUE

 

El 18 de marzo el foco se mueve a las residencias. Cientos de ancianos mueren solos a causa de la Covid-19 (la pesadilla lleva un mes con nombre). Y a grandes males, remedios de emergencia: el 23 empieza a funcionar el hospital del Ifema para dar respiro a un sistema al límite; el 24 el Palacio de Hielo de Madrid, por donde antes se patinaba, se convierte en morgue porque las funerarias tampoco dan abasto. 

Operarios de una funeraria recogen el cuerpo de una persona fallecida durante la primera ola.
Operarios de una funeraria recogen el cuerpo de una persona fallecida durante la primera ola.
JORGE PARÍS

El día 25, España, con más de 3.400 muertes, supera a China, si es que el dato de China es real, si es que los datos en general son reales (como luego cuestionará el exceso de mortalidad del INE).

 

Ifema, el hospital de la pandemia.
Ifema, el hospital de la pandemia.
JORGE PARÍS

 

 

DOS VISITAS AL HOSPITAL MÁS GRANDE DE ESPAÑA

20minutos acudió en dos ocasiones a esa feria de congresos reconvertida en hospital en tiempo récord. En la primera visita se palpaban la desesperación y el miedo. En la segunda, se leían mensajes de esperanza: "No sé quién eres, pero mejórate pronto".

JORGE PARÍS | BIEITO ÁLVAREZ | JAVIER LÓPEZ MACÍAS

 

CAPÍTULO 7. EN LA TRINCHERA

 

El primer día de abril trae noticias dramáticas, más aún: 100.000 contagios y casi 10.000. fallecidos Un día después, otra: 950 muertos en un día, récord. El Gobierno rectifica y cambia de criterio, ahora mascarilla sí (las hará obligatorias en mayo). Luego sabremos que antes no había. Tan duro y tan simple como eso.

Con la curva desbordando el gráfico, la odisea baja de planta: de urgencias a UCI, donde están los pacientes a los que el virus ataca sin piedad. Allí entró 20minutos un 17 de abril.

 

 

 

Fuera de los hospitales también hay crisis: los datos del paro son desoladores. Miles de negocios se van a pique, hay familias confinadas en 35m2 y la palabra que más se repite es "ERTE". Las colas del hambre son una realidad. Es el siglo XXI, sí.  

 

Las colas del hambre a costa de la pandemia.
Las colas del hambre a costa de la pandemia.
JORGE PARÍS

 

CAPÍTULO 8. FRACTURA

 

Estamos en mayo ya y el confinamiento pesa. A los aplausos se suma otro sonido cada vez más fuerte: las caceroladas de las nueve. El consenso político para prorrogar los estados de alarma se rompe. Ya no se va a una (ni en el Congreso ni en la calle) y cada vez cuesta más sacarlos adelante. La desunión política desespera, pero los esfuerzos empiezan a dar sus frutos y los datos bajan poco a poco. 

 

El hospital del Ifema cierra y se pone en marcha un plan de desescalada para que la vida vuelva a ser lo que era. El día 20 las mascarillas se hacen obligatorias. El 27 se decretan 10 días de luto oficial para despedir a los que se han ido, son muchos los que no han podido hacerlo. Ya hay más de 27.000 muertos.

 

CAPÍTULO 9. LLEGA EL RESPIRO 

 

Una pareja se abraza con emoción en el aeropuerto de Barajas. Llevaban separados por la pandemia unos meses.
Una pareja se abraza con emoción en el aeropuerto de Barajas. Llevaban separados por la pandemia unos meses.
JORGE PARÍS

Junio es sinónimo de ilusión (¿engañosa?). El fin del estado de alarma llega el día 21 -se pasa del mando único a la gestión autonómica- y la vida empieza a parecerse a lo que era antes. Salvo por las mascarillas, los codos y la conversación: se habla de secuelas, covid persistente, trombos, alteraciones de olor y sabor, anticuerpos... 

 

Y entonces un dato, el del estudio de seroprevalencia, sorprende: solo el 5% de la población española ha pasado el coronavirus. "¿Tan poco?", nos preguntamos todos. La sensación generalizada es la misma: "No puede ser".

Las vacaciones son atípicas, pero en julio quienes no han sido golpeados por el temido virus intentan olvidar en terrazas y playas. En agosto, la relajación de las medidas tiene consecuencias. No era una gripe, no afectaba solo a los mayores. Ya hay casos de jóvenes infectados. El ocio nocturno cierra. 

 

Asistentes en el Museo del Prado con mascarilla.
Asistentes en el Museo del Prado con mascarilla.
JORGE PARIS

CAPÍTULO 10. DÉJÀ VU 

 

Los colegios abren en septiembre -no sin miedo- y los expertos hablan ya de una segunda ola. Los sanitarios se revuelven (especialmente los de atención primaria) y los hospitales alertan: "Volvemos a lo mismo y no sabemos si vamos a ser capaces de controlarlo a tiempo". 

 

Toma de temperatura a alumnos en un colegio de Madrid
Toma de temperatura a alumnos en un colegio de Madrid
Jesús Hellín/EP

A punto de acabar el mes, la Comunidad de Madrid, otra vez a la cabeza en número de casos, impone confinamientos por zonas básicas de salud. En unas semanas le seguirán el resto, aunque cada una a su manera. Cada Comunidad -y son 17- va por libre. El Gobierno ya no impone, sugiere. ¿Descentralización o un sálvese quien pueda?

 

 

CAPÍTULO 11. "LO PEOR VIENE AHORA"

 

Miles de infectados vuelven a copar los hospitales españoles.
Miles de infectados vuelven a copar los hospitales españoles.
JORGE PARÍS

Octubre y la curva sigue en ascenso, justo cuando se cumplen seis meses de aquella primera vez en la UCI. Entonces, volver no estaba en los planes de nadie, pero el viernes 16, con la cifra más alta de la segunda ola hasta ese momento, entramos para ver cómo lo viven allí dentro. Los médicos temen al frío y la gripe, y su mensaje es claro: "Lo peor no ha pasado, eso viene ahora". 

 

 

 

En el corazón de la UCI

Todo en la UCI pita. Es un sonido constante, agudo, rítmico, el de las máquinas que mantienen un pulso a vida o muerte con el virus. De repente, ese pitido cambia, se acelera. El oído lo escucha, pero el corazón más. Pasos, ajetreo, parada. Cada segundo cuenta.

CARLOTA CHIARRONI | JORGE PARÍS

CAPÍTULO 12. ESPERANZA  

 

A final de año dos temas monopolizan el debate: la temida Navidad y la ilusión por la vacuna. Araceli (no necesita más presentación que esa) abre camino, pero luego le siguen personas como Javier, que se puso la primera dosis para estar algo más cerca de su "nietillo", al que lleva una eternidad sin abrazar. 

 

Unos jóvenes se abrazan en una Puerta del Sol más vacía que otras veces.
Abrazos en Sol ante un futuro de esperanza.
JORGE PARÍS

A estas alturas, se han escrito ya miles de historias sobre el coronavirus. Muchas (demasiadas) terribles, dolorosas, pero también otras como la de Araceli o Javier, que nos ayudan a mantener la esperanza.

 

 

 

Aunque ahora el desenlace se ve algo más cerca, las 320 muertes del martes y las más de 50.000 desde el inicio de la pandemia siguen presentes. Con solo el 9,9% de los españoles con anticuerpos y el fantasma de una tercera ola, es evidente que el virus nos acompañará todavía un poco más, que esta historia que empezó hace un año en un mercado de Wuhan está inacabada. Ojalá 2021 le dé un buen final.

 

Un enfermero contempla cómo atienden a un paciente entubado en la UCI.
Un enfermero contempla cómo atienden a un paciente intubado en la UCI.
JORGE PARÍS