Dos días antes de que se abriera la veda, empezaron a llegar los barcos de los pescadores que acabarán con la vida de más de 300.000 focas en las próximas semanas. Esta foca, ignorante de su destino, mira a los barcos que se acercan por el horizonte.
Brian Kerry/HSUSRebecca Aldworth y sus compañeros de "Protect the Seals" merodean por los alrededores de la costa mientras esperaban a los pesqueros. En la web de Protect the Seals puede verse en tiempo real el contador de focas muertas.
Brian Kerry/HSUSA pesar de que el Ministerio de Pesca canadiense insiste en que las focas devoran el bacalao y que ésa es una de las principales causas para la casi desaparición de la especie, los científicos no han sido capaces de demostrar esta teoría y las organizaciones ecologistas la califican de "cuentos".
Brian Kerry/HSUSEste año la caza de focas ha alcanzado un nivel de polémica nacional e internacional no visto desde hace más de una década cuando el entonces ministro de Pesca, Brian Tobin, promovió de nuevo la caza masiva de focas como forma de recuperar los exhaustos bancos de bacalao.
Brian Kerry/HSUSPor su parte, el Ministro de Pesca canadiense, Geoff Reagan, ha acusado a las organizaciones ecologistas opuestas a la caza de estar motivada por intereses pecuniarios con "imágenes sensacionalistas y retórica entrecortada" que amenaza la forma de vida de miles de personas en la isla de Terranova.
Brian Kerry/HSUSMientras la polémica sigue, 90.000 jóvenes focas, que ahora reposan sobre los hielos del golfo de San Lorenzo, serán cazadas en menos de tres días.
Brian Kerry/HSUSUn grupo de veterinarios que acudió a Canadá, invitado por el FondoInternacional para el Bienestar Animal, durante el 2001 fue a lacacería e indicó que el 40% de los animales habían sido despellejados estando vivos. En la imagen, Rebecca Aldworth con una de las crías de foca.
Brian Kerry/HSUSRebecca Aldworth y sus compañeros están grabando las imágenes que se distribuirán en el mundo entero. Varios grupos ecologistas ya han anunciado que impulsarán un boicot contra el pescado canadiense al tiempo que se difundan las primeras cintas y fotografías de las focas muertas.
Brian Kerry/HSUSLas organizaciones defensoras de los animales denuncian la crueldad con la que son asesinados estos mamíferos. La Fundación Altarriba explica que a principios de la temporada los cazadores utilizan porras o picos de hierro para matar a golpes a las crías de estos animales. En los meses posteriores se pasa a utilizar el rifle.
Brian Kerry/HSUSLa IFAW ya ha señalado en varias ocasiones que no se cumplen las normas gubernamentales y que durante la cacería se vulneran las leyes básicas canadienses sobre el bienestar animal.
Brian Kerry/HSUSDesde que comenzó la campaña, ya son más de 30.000 las focas que han muerto sobre el hielo canadiense.
ReutersUn barco pesquero canadiense procede a cargar en sus bodegas las pieles de focas arpa cazadas hoy. Las organizaciones ecologistas denuncian que la caza se lleva a cabo para que los pescadores obtengan unos escasos ingresos fuera de la temporada de pesca.
Julio César Rivas/EFELa HSUS señala que los métodos para matar a las focas son extremadamente crueles, ya que las pieles de estos animales pierden valor en función de los agujeros de bala que tengan, por lo que los cazadores se resisten a disparar más de una vez dejando a los animales agonizantes.
Brian Kerry/HSUSDos focas heridas agonizan en el hielo tras de ser golpeadas con un garrote llamado 'hakapik' que normalmente se utiliza para romper el hielo.
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