Una turista ayuda a retirar lodo en un pequeño hospital de Panabaj, Guatemala. Gente de vacaciones de distintas nacionalidades que estaba alojada en los complejos hoteleros de la zona han acudido a Panabaj (un pueblo maya que fue casi totalmente sepultado) de forma voluntaria a ayudar llevando a cabo todo tipo de trabajos, desde limpiar hasta recuperar cuerpos.
REUTERS/Daniel LeClairCientos de muertos en Guatemala. La tormenta tropical Stan ha dejado un panorama de desolación y cadáveres en el país centroamericano, donde han fallecido cientos de personas, en su peor catástrofe natural de la historia. En la imagen, un miembro de los equipos de rescate lleva en brazos el cadáver de un bebé.
ReutersUn bombero español emplea un perro entrenado para localizar supervivientes en Panabaj, Guatemala. Allí han muerto más de 1.400 indios mayas como consecuencia del huracán Stan.
Daniel Aguilar/REUTERSEsperando ayuda en un centro de distribución de víveres en puerto de San José 150 kilómetros al sur de la capital guatemalteca. Cientos de personas permanecían ayer en los albergues del puerto San José debido a los estragos tras el paso del huracán "Stan". Las autoridades médicas se encuentran en alerta por posibles brotes de epidemias y enfermedades de la piel y gastrointestinales.
Ulises Rodríguez/EFEDos niños juegan al fútbol frente al viejo puerto de San José, destruido hace 25 años por un tifón, y en cuyos albergues permanecen cientos de personas debido a los estragos causados por el paso la tormenta "Stan".
Ulises Rodríguez/EFEAntonio Sales de 47 años, habitante de la comunidad el Martillo situada a unos 107 kilómetros al sur de la capital de Guatemala, pesca en busca de alimento, a un costado de la carretera rumbo a puerto San José.
Ulises Rodríguez/EFEPese a estar rodeados de la destrucción que dejó el huracán Stan, los habitantes de las poblaciones guatemaltecas afectadas tratan de salir adelante consiguiendo comida y agua. Muchas ciudades siguen sin energía y ya se han declarado las primeras epidemias.
Daniel Aguilar / ReutersLos habitantes de la localidad guatemalteca de Panajab tratan de rescatar los pocos bienes que quedaron después de que la avalancha de lodo irrumpiera en sus casas la semana pasada; un suceso en que se calcula perecieron unos 1.400 miembros de poblaciones indígenas.
Daniel Aguilar / ReutersLos bomberos pintan marcas en una de las casas destruidas por el huracán Stan en Panabaj, mientras continúan con la búsqueda de cientos de víctimas que quedaron sepultadas por el alud de lodo.
Daniel LeClair / ReutersLas organizaciones humanitarias trabajan en la zona para repartir alimentos entre los damnificados, que se cuentan por decenas de miles. Los habitantes de la comunidad El Martillo, al sur de la capital, hacen fila para recibir ayuda.
Ulises Rodríguez / EfeLos tanatorios se han visto desbordados ante la elevada cifra de muertos causados por el huracán y las autoridades han tenido que improvisar instalaciones mortuorias. Tras la pila de ataúdes en Panabaj, varios habitantes esperan noticias de sus familiares desaparecidos.
Daniel Aguilar / ReutersEn El Salvador, casi 70.000 afectados. Un niño salvadoreño recibe sus alimentos en el centro escolar Fabio Castillo, que ha sido utilizado como albergue para damnificados por las torrenciales lluvias que causó la tormenta tropical Stan en Ilopango, a 20 kilómetros al este de la capital salvadoreña. La cifra de personas evacuadas por las lluvias aumentó a 69.603 en El Salvador y la de fallecidas se mantiene en 69.
Roberto Escobar / EfePanabaj, un camposanto. La localidad indígena quedó sepultada bajo un alud de piedras y lodo. En la localidad, a 180 kilómetros al occidente de Ciudad de Guatemala, se estima que hay entre dos mil o tres mil desaparecidos. Las autoridades han declarado el pueblo fosa común, ante la imposibilidad de rescatar muchos de los cadáveres.
Ulises Rodríguez / EfeAyuda española. Dos miembros de la Agencia Española de Cooperación Internacional revisan las 60 toneladas de ayuda enviada hacia la zona afectada por el huracán Stan.
Bernardo Rodriguez / EPAInundaciones. Un grupo de personas tarata de recoger sus pertenencias después de que sus casas resultaran afectadas por las lluvias provocadas por la tormenta tropical Stan, en la comunidad El Cañito, en El Salvador.
Ericka Chaver / EfeDos niños permanecen en un albergue después de que sus casas fueran destruidas por las inundaciones ocasionadas tras el paso del huracán "Stan" en la aldea Caserío Ojo de Agua, en San Marcos (Guatemala), a 254 kilómetros de la capital guatemalteca. Cientos de personas fueron afectadas por el paso del huracán.
EFE/Ulises Rodríguez