Caladas a contrarreloj. Una mujer coloca un reloj que prohibe fumar para hacer así referencia a la puesta en marcha, a partir del domingo, de la nueva Ley antitabaco que establece la prohibición total de fumar en los centros de trabajo, centros y dependencias de las Administraciones públicas, centros comerciales, culturales y de ocio, entre otros .
Luis Tejido / EFE... Y los ceniceros, ¡fuera! Un operario retira los ceniceros del Ministerio de Administraciones Públicas, un acto simbólico a dos días de la entrada en vigor de la ley antitabaco. Mientras tanto, los teléfonos que Sanidad había instalado para brindar información sobre la nueva normativa quedaron bloqueados por el volumen de consultas.
Victor Lerena / EFEDesalojo total. No sólo los ceniceros de pie fueron desalojados del Ministerio. Hasta los de mesa fueron retirados en previsión de la entrada en vigor de la ley.
Victor Lerena / EFEEn un rincón. De un día para otro, todos estos ceniceros han dejado de tener utilidad en el Ministerio de Administraciones Públicas. Antes elementos indispensables en las oficinas, ahora están apilados en un rincón esperando su viaje al contenedor de basura.
Victor Lerena / EFESobre aviso no hay engaño. Como las de muchas otras oficinas y establecimientos, las puertas del Ministerio de Administraciones Públicas lucen letreros que recuerdan la prohibición de fumar.
Victor Lerena / EFEDemocracia y nicotina. Como los locales pequeños tendrán que decidir si se convierten o no en establecimientos para fumadores, varios han sido los bares y restaurantes que han hecho votaciones entre sus clientes para consultarlos. Como esta votación hecha en el Bar Ducal, de Cádiz.
Jorge Zapata / EFEColapso. Las dudas sobre la aplicación de la Ley antitabaco son tantas, que los teléfonos de información que el Ministerio de Sanidad había habilitado para consultas se colapsaron ante el volumen de llamadas.
Emilio Naranjo / EFEFumar fuera. Una empleada sale fuera de su centro de trabajo para fumarse un pitillo. Una estampa que será la usual a partir del 1 de enero.
Emilio Naranjo / EFEFin de año sin humos. Dos chicas fuman en la calle antes de entrar en una discoteca para celebrar el año nuevo para no quebrare la recién estrenada Ley Antitabaco.
B. Echavarri / EFECada uno en su lugar. Quienes fueron a restaurantes para las comidas de año nuevo vieron los primeros efectos de la nueva Ley Antitabaco. En este restaurante de Madrid los comensales ya se dividieron en áreas de fumar y libres de humo.
Susana Vera / Reuters