A Tamara, perdón... A Ámbar, perdón... a Yurena el culebrón le ha "perseguido toda la vida". Dilapidada, hundada, fustigada en la arena televisiva. Ante todo "dolida" por ser "yo misma, auténtica", dice, por amamantar a tantas "garrapatas que no son personas ni son nada".
Jorge ParísLa conocimos por Tamara, pero otra Tamara, cantante de boleros, recurrió judicialmente, y tuvo que cambiarlo. Después, le pusieron Ámbar en un programa de televisión, pero una empresa también lo recurrió. Al final, ha sido Yurena, significa en guanche "hija de la luna", dice. Aunque el diccionario Teberite de lengua canaria dice que es "demonio".
Jorge ParísSu primer sencillo vendió 40.000 copias y fue todo un éxito. Su estética travestida. Su estilo retro marcaron una tendencia. El tema "no cambie" se convirtió en el himno que la catapultó.
Jorge ParísOhh, musa Yurena, tus fans lloran tu pérdida, tus dos intentos de suicidio... Pero tranquilos, ¡Vuelve! Está aquí la reina del cutrelux, aristócrata del látex, sexy camaleón de minicejas con horizonte infinito. Dispuesta a pintar con todo el maquillaje que luce en su rostro los muros del mundo diciendo: "ya no quiero ser la reina del papel couché"
Jorge ParísYurena según Yurena: NADA FREAK. "Para mí friki es despectivo, lo utiliza la gente que quiere diferenciar entre personajes con clase y los que no. Yo soy muy normalita. No voy a saraos. Soy una profesional de la música y nada nocturna".
Jorge París"No soy infantil, pero sí cariñosa, incluso pegajosa. Coqueta pero no presumida. Mi estética ha sido ambigua desde el principio, a los dieciséis años ya era así"
Jorge París