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El truco para evitar que el agua se salga de la olla al cocer alimentos

Olla con agua hirviendo
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En la cocina existen dos tipos de personas: las que disfrutan del proceso, aprovechando cualquier rato libre para meterse entre los fogones y, en contraposición, las personas que cocinan casi por obligación. Para las últimas, no hay nada más placentero que poder meter la comida al microondas, al horno, a la olla, etc., y dejar que se cocine mientras aprovechan ese tiempo para hacer otras cosas de mayor interés.

El problema está en que cuando ponemos algo a cocer, tenemos que estar muy pendientes a ello, porque cuando menos lo esperamos, el agua empieza a brotar y a salirse de la olla, haciendo un destrozo en la vitrocerámica o en los fuegos que tendremos que secar muy bien para seguir cocinando.

Pero tranquilo, porque de la misma forma que existen técnicas para cortar la cebolla sin llorar, también hay trucos que conseguirán que el agua hirviendo no se nos salga de la olla nunca más. 

Aceite de oliva: el truco para que el agua no se salga

Así es. Si no quieres que el agua brote y se salga sin control, tan solo tienes que untar el borde de la olla con un poco de aceite. La forma más sencilla —y menos pringosa— es echando el aceite en un papel de cocina y restregándolo en la cazuela.

Este truco provocará que, cuando el agua empiece a hervir y entre en contacto con el aceite que hemos untado, no pueda salirse debido a la diferencia de densidades entre los dos líquidos. Podríamos decir que la capa de aceite que cubre al borde de la olla funcionaria como un repelente al agua. 

Por ello, el truco se ha viralizado en redes sociales, y ha solucionado este problema a muchas personas.

Otros trucos para evitar que el agua se salga de la olla 

Si el truco del aceite te ha parecido sencillo, este lo es aún más. De hecho, es el truco que más se utiliza por lo simple que es. Sólo necesitas una cuchara de madera para ponerla encima de la olla con agua hirviendo. Ya está, ese es el truco. Como puedes leer, es imposible que exista algo más sencillo que poner una cuchara de madera sobre la cazuela para que evite que se salga el agua.

Además, lo bueno es que este truco sirve para cualquier líquido, pudiendo estar completamente tranquilo si tienes hirviendo leche, caldo, etc., porque no se va a derramar por la cocina. 

De la misma forma que explicábamos que el aceite hace una especie de “capa repelente” para el agua hirviendo, la madera de la cuchara actúa del mismo modo. Es un aislante, y al entrar en contacto con el agua descontrolado, la cuchara de madera reducirá la ebullición, impidiendo que se salga y dejando que la comida se haga sin estar tan pendiente. 

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