Receta de pastel de calabacín de Arguiñano, perfecta para llevar
Tras el fin de las vacaciones y la vuelta al trabajo, son muchos los que tienen que comer de tupper de lunes a viernes en la oficina, una situación que a priori puede resultar abrumadora si no se planifica adecuadamente.
Para ello, el cocinero Karlos Arguiñano cuenta con una rica y sana receta, apta para vegetarianos y que tiene al calabacín como ingrediente principal. Se trata de un pastel de calabacín al horno, un plato muy fácil de preparar y perfecta para llevar al trabajo.
En su programa Cocina abierta, el cocinero ha mostrado cómo elaborar esta sencilla y deliciosa receta en poco más de 30 minutos.
Pastel de calabacín
Ingredientes
- 2 calabacines
- 2 cebollas
- 3 huevos
- 100 ml de nata (un vaso aproximadamente)
- 100 ml de leche
- 100 gr de queso rallado
- 250 ml de salsa de tomate (opcional)
- Aceite de oliva virgen extra
- 2 cucharadas de harina
- 1 cucharadita de orégano
- Sal
Elaboración
El primer paso es dorar las cebollas. Para ello, se pelan y se cortan en juliana para rehogar, durante 6-8 minutos, en una sartén en la que habremos puesto 3-4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra.
A continuación, se lavan los calabacines y se cortan por la mitad y luego en medias lunas, con piel. "Cuando ya está la cebolla bien pochada, se añade el calabacín", explica Arguiñano en su receta.
En opinión del cocinero, "el mayor trabajo que tiene este plato es el que se pochen las verduras", que se terminarán de hacer con la sartén a fuego medio. "Esto lo vais a hacer por primera vez y vais a alucinar, porque os va a salir", asegura Arguiñano sobre la receta.
En un bol aparte, se mezclan los tres huevos, el orégano, una pizca de sal, y los 100 ml de leche y nata líquida. Una vez batido todo, se incorpora la cebolla y el calabacín y se integran bien todos los ingredientes.
En un molde apto para horno en el que previamente se ha untado con una cucharada de aceite y harina y colocado papel de horno para que no se pegue, se vierte la mezcla. A continuación, se espolvorea con el queso rallado. "No tiene más misterio, ninguna complicación", explica Arguiñano.
Por último, se introduce al horno precalentado a 180ºC durante 30 minutos. Una vez transcurrido ese tiempo y sacarlo del horno, se deja templar antes de consumir.
De manera opcional, se puede servir junto a un poco de salsa de tomate para acompañar el plato.