Cómo hacer un pisto de verduras casero, una receta sabrosa, barata y fácil
- Se pueden añadir otras verduras diferentes o, incluso, quitar alguna de la elaboración, para que se adapte al gusto de cada uno.
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El pisto es un básico de la cocina, un plato que acepta casi cualquier verdura y con una elaboración muy sencilla, al alcance de incluso los más perezosos o patosos entre fogones.
Se trata de una de las elaboraciones más versátiles que existen, perfecto como acompañamiento a cualquier receta de carne, de arroz o de pasta, con huevo cocido o escalfado, con bonito en conserva o jamón picado o incluso solo, con una buena rebanada de pan.
Esta es una de las recetas tradicionales de pisto, pero se pueden incluir otras verduras diferentes o, incluso, quitar alguna de la elaboración, de tal modo que se adapte al gusto y a la nevera de cualquier persona.
Pisto tradicional
Ingredientes
4 o 5 tomates maduros
1 cebolla mediana
1 pimiento rojo
1 pimiento verde
1 calabacín
1 berenjena
Aceite de oliva virgen extra
Sal
Pimienta
Elaboración
En primer lugar, lavamos todas las verduras y las picamos en pequeños cuadraditos. El diente de ajo y la cebolla los picamos un poco más pequeños. El tomate, por su parte, podemos rallarlo en lugar de picarlo.
Cubrimos el fondo de una sartén con una lámina de aceite de oliva y dejamos que se caliente bien. Cuando esté listo, añadimos la cebolla y el ajo y sofreímos 15 minutos a fuego suave.
Después, añadimos los pimientos. Aún con la temperatura baja, dejamos en la sartén durante unos minutos más.
Añadimos por último el calabacín y la berenjena, además del tomate que debemos echar a la sartén en último lugar, para que rehogue con el resto de ingredientes.
Dejamos cocinar por al menos 15 minutos más o hasta que todos los ingredientes estén integrados y blanditos. Por último, salpimentamos todos los ingredientes.