El truco para preparar albóndigas de manera más rápida y sencilla: necesitas una huevera
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Probablemente, si en la infancia te hubiésemos preguntado por tu comida favorita, además de la pizza o los macarrones con tomate es probable que las albóndigas hiciesen su aparición, y no es para menos.
Estas pequeñas bolitas de carne picada se han convertido en uno de los platos más populares entre mayores y pequeños y también más fáciles de preparar, aunque maestrillo tiene su librillo y cada madre su receta. Y como las recetas de albóndigas familiares que han pasado de generación en generación, no hay nada.
Las albóndigas no tienen más misterio que escoger una buena materia prima de calidad y preparar la mejor salsa o acompañamiento a nuestro gusto. Se podría decir que probablemente uno de los primeros recuerdos que tengamos en cocina es amasando albóndigas, aunque en lugar de tener que ir dándole forma una por una, existe otra manera mucho más rápida de preparar una cantidad importante de albóndigas a la vez.
Carne picada y una huevera grande
Probablemente seas de los que compras huevos en cantidades reducidas para ir consumiendo, aunque si en alguna ocasión has comprado la típica huevera de 24 unidades, asegúrate de guardarla porque te va a servir para preparar tus albóndigas. Como lo lees.
Prepara el relleno para tus albóndigas y disponte para elaborar albóndigas de 24 en 24 de la forma más fácil y rápida. Para ello, consigue dos hueveras de 24 unidades y pon por encima un papel film para preparar el recipiente.
Vuelca el relleno de las albóndigas sobre la huevera que hemos preparado y extiende bien para crear una capa homogénea. Una vez hemos realizado estos pasos ponemos otro film por encima del relleno.
Coloca la otra huevera encima haciéndola cuadrar con la de abajo y presiona para que, de esta manera, se forme una bola de carne en cada uno de los huecos de los huevos.
Levantamos la huevera superior, retiramos el papel film y cogemos cada una de las bolitas de carne para, rápidamente terminar de darles forma.