Venden un jarrón chino que tenían cogiendo polvo desde hace años por 9 millones de dólares

No se trata de algo habitual, pero en ocasiones algunos de los objetos que vendemos o que por alguna razón han llegado a nuestras manos resultan ser de un valor incalculable. Esto es lo que le ocurrió a una anciana que disponía de un jarrón chino que heredó y que ha vendido posteriormente por 9 millones de dólares, tras descubrirse que se trataba de una pieza única. 

Sotheby’s Johan Bosch van Rosenthal, un especialista en arte, recibió la llamada de una anciana que quería vender algunas antigüedades que creía que podían tener algo de valor. Cuando el experto en arte acudió al domicilio de la anciana, encontró el jarrón chino y quedó impactado sabiendo que no se trataba de un jarrón cualquiera. 

Un vídeo de la galería de arte recoge las impresiones de van Rosenthal, que se sorprendió del hallazgo y envió fotografías a Nicholas Chow, presidente de Sotheby's Asia. El holandés quedo perplejo anta el hecho de que la pieza hubiera estado rondando por la casa y cogiendo polvo, con los animales de la dueña merodeando a su alrededor. 

Chow descubrió poco después que el jarrón era una pieza única del siglo XVIII, denominada jarrón reticulado Harry Garner. La obra fue un regalo para el emperador chino Qianlong y se creía perdida. En él se reúnen, casi por completo, las diferentes técnicas de la alfarería oriental. 

Además, los expertos de Sotheby's descubrieron que la obra llegó a estar expuesta en el Palacio de la Pureza Celestial, en la Ciudad Prohibida de Beijing.

Fue vendido en 1954

Una subasta de Sotheby's, a mediados de los cincuenta, hizo que la pieza se vendiera por solo 56 dólares. Posteriormente, en una segunda venta, ese mismo año, el jarrón fue comprado por 101 dólares. Finalmente, fue obtenido por un familiar de la hasta ahora dueña de la obra.

La semana pasada la pieza era sometida a una nueva venta, llevada a cabo por Sotheby's Hong Kong, que logró vender la pieza por un total de 9.084.486 dólares.