Uno de las principales advertencias que reciben aquellos que ganan un gran premio de lotería o juegos de azar es que sean cautos, ya que la mayoría de ellos acabarán dilapidando todas sus ganancias en pocos años.

Un buen ejemplo de ello es Lee Ryan, un británico que ganó en 1995 un premio de 6,5 millones de libras esterlinas (7,5 millones de euros) y ahora rehace su vida tras arruinarse y acabar durmiendo en la calle.

Tal y como recoge el Mirror, tras ganar su premio, Lee Ryan compró una mansión con piscina, dos motos Ducati, un avión, un helicóptero y una flota de coches de lujo.

El hombre que perdió 6,5 millones de euros que ganó en la Bonoloto: "Estoy muerto en vida"

Pero su vida entró en barrena y en el año 2010 estaba arruinado, sin un hogar, viviendo en las calles y calificando su premio de lotería como "una maldición". Ahora, Ryan, de 63 años, ha rehecho su vida, trabaja como decorador y pintor de casas y afirma ser "más feliz que nunca".

Curiosamente, afirma que todavía juega a la lotería y confía en que volverá a ganar, pero promete que gastará el dinero en ayudar a las personas sin hogar. Lee Ryan dijo: "Creo en la ley de la atracción, así que creo que volveré a ganar, pero no significará más para mí que antes. Sé que suena raro, pero no necesito nada".

Lee Ryan que pasó cinco años viviendo en las calles, dijo: "Si me pasara otra vez, abriría un hotel para personas sin hogar. Entonces sentiría que has hecho algo que vale la pena".

Los problemas económicos pasan factura a uno de los ganadores más jóvenes de Euromillones en Reino Unido

Ryan, que había tenido problemas con la justicia y de hecho había pasado por prisión por robar coches, ganó el premio en 1995, y aunque quiso mantenerlo en secreto, se lo dijo a su familia y no pudo ocultarlo más.

El recién millonario compró un Bentley, un Ferrari, un Porsche y un BMW y les puso como matrícula LEE 1, LEE 2, LEE 3 y LEE 4. Compró una mansión de un millón de libras con piscina, cancha de tenis, sauna y jacuzzi, así como dos motos Ducati, un avión de 125.000 libras esterlinas y helicóptero de 235.000 libras.

"La gente siempre piensa: 'Oh, si gano mañana será el final de mis preocupaciones'. Eso no es cierto, esto es solo el comienzo de tus preocupaciones", dice Lee Ryan.

Cuando ganar el Euromillones no trae la felicidad: "El dinero ha destruido mi vida"

"Verás quién es quién en tu vida, incluso tu propia familia se fractura. En realidad, todo es solo una ilusión. Todas estas posesiones te atrapan. La gente piensa que te va bien por lo que tienes, pero yo conozco personas con tanto dinero que son miserables", afirma.

Lee Ryan cortó con su pareja y se fue con su nueva novia al país de esta, Kirguistán, donde perdió dos millones en inversiones fallidas. Acabó divorciado y regresando a Reino Unido sin un penique, lo que le abocó a dormir en la calle.

Y ofrece un consejo más: "La gente piensa que todos estarán felices por ti cuando ganes. No lo harán, todos estarán celosos y te perseguirán. El abismo entre los que tienen hoy en día y los que no es enorme. La gente tiene demasiado para su propio bien. Si gano de nuevo, nadie se enterará", sentencia.