Cuál es el curioso origen del Roscón de Reyes

Es dulce, de forma circular, relleno de nata y decorado con frutas confitadas, ¡es el Roscón de Reyes! El protagonista indiscutible de la sobremesa cada 6 de enero o en la víspera del día de Reyes. Y, aunque el nombre nos suene parecido, el origen de este delicioso postre nada tiene que ver con el nacimiento de Jesús y la llegada de los Reyes Magos al Portal de Belén.

Las teorías de su origen

Hay muchas historias sobre su origen. Algunas incluso se remontan a la Antigua Roma, o surgen de diversas tradiciones y culturas que se han entrelazado a lo largo de la historia.

Una de las teorías encuentra sus raíces en las saturnales romanas, festividades dedicadas al dios Saturno. Estas celebraciones marcaban el inicio de los días que comenzaban a ser más largos, luego del solsticio de invierno, y se preparaban tartas redondas con ingredientes como calabaza, higos, dátiles y miel.

Cuenta la leyenda que estos bizcochos después se distribuían entre la población. Lo peculiar era que los postres escondían en su interior un haba seca y el afortunado que la encontrara era coronado como el "rey de reyes" o el "rey de la fiesta", gobernando de manera burlesca y festiva durante uno o varios días.

Otra interpretación del origen del Roscón de Reyes se sitúa en la Edad Media, específicamente en el siglo XII, en el Reino de Navarra, donde se dice que se preparaba un dulce llamado Roscón de Reyes o Rey de la Faba. La tradición también consistía en esconder un haba seca en la masa y el niño que la descubriera era nombrado Rey de la Faba.

También hay otra historia que surge en Al-Ándalus (nombre que se dio a la península ibérica cuando estaba bajo dominio musulmán en la Edad Media). En esta época, al parecer, la costumbre era elaborar una torta que escondía una moneda por dentro y quien la encontrara iba a ser afortunado.

La referencia francesa de Roscón de Reyes.

En Francia existe un postre similar al Roscón de Reyes, pero allí se llama "Gâteau des Rois" (Pastel de Reyes o Corona de Reyes).

Su posible origen se remonta a la corte de Luis XV, en donde hacían un bizcocho, pero con masa de hojaldre y estaba relleno con una crema de almendras molidas, azúcar, algo de mantequilla y yema de huevo, al que también le introducían un obsequio o moneda.

El único consenso en las historias de su origen es que, lo que hoy conocemos como Roscón de Reyes, es una tradición pagana que, como muchas otras, se ha adaptado al cristianismo y por eso sigue vigente.

Una cosa sí ha cambiado: el haba era símbolo de fortuna, hoy quien la encuentra es el desafortunado y quien halla la figurita del rey es el que se lleva la buena suerte. Pero con haba o con figurita, ¡el más afortunado con el Roscón de Reyes es el paladar!