Una hiena escapó por poco de ser devorada por un hipopótamo, tras creer esta que el animal estaba muerto. El guía de safari Carlos Ismail estaba dirigiendo un recorrido por el cráter del Ngorongoro, Tanzania, cuando vio a la carroñera oportunista vadeando un poco de agua.
Las tensas imágenes muestran a la hiena arrastrándose sobre el trasero de un hipopótamo aparentemente inmóvil medio sumergido bajo las algas.
De repente, la hiena giró la cola y justo a tiempo cuando el hipopótamo giró su enorme cuerpo y la ahuyentó del agua, casi atrapándola entre sus poderosas mandíbulas.
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