Salir de la playa empapados o todavía mojados e ir a coger el coche es una acción de lo más habitual. Y, ante ello, es normal que queramos secar la ropa lo antes posible para no dejarlo todo lleno de agua. En esos casos necesitamos una solución rápida y efectiva, de igual manera que si estamos en la calle y llueve y necesitamos secar nuestra ropa. 

Por suerte, existe un truco definitivo que puedo servir para salir al paso de este tipo de situaciones. Este método, tal y como se describe desde la cuenta de Instagram de teachermalaysia, no requiere de equipos complicados ni de mucho tiempo, por lo que es ideal para conseguir secar nuestra ropa de la manera más rápida posible. 

Para llevarlo a cabo tan solo necesitaremos una toalla grande y un poco de maña. Este método consiste en desplegar la toalla en una superficie lo más grande posible. Tras ello, se debe extender la ropa mojada sobre la toalla, de manera que quede todo dentro de ella. Acto seguido, comenzaremos a enrollar la toalla de la forma más apretada posible y una vez lo tengamos, tendremos que estrujar lo más fuerte posible el "churro" resultante. 

De esta forma, haremos que la toalla absorba todo el agua de las prendas mojadas, o al menos gran parte de ella. Si estamos en un hotel, se puede meter la ropa dentro de una bolsa que tengamos a mano y darle con aire caliente del secador, con lo que eliminaremos la humedad más rápidamente. 

Por otro lado, si lo que se han secado son los calcetines, hay otro truco que puede ser útil. Consiste en usar botellas de agua pequeñas llenas de agua caliente. Cada uno de estos recipientes debe introducirse en cada uno de los calcetines mojados con lo que la humedad del calcetín se evaporará, dejándolos secos y listos en tan solo unos minutos. 

Además de estas acciones, se recomienda también llevar siempre una bolsa impermeable en la que meter toda la ropa mojada, de forma que si tenemos alguna prenda húmeda la metamos ahí sin que esta moje el resto de cosas de nuestra bolsa de vacaciones. Asimismo, es muy conveniente llevar también ropa de recambio siempre que lo vayamos a necesitar para tener en todo momento ropa seca con la que poder cambiarnos.