El Aeropuerto de Scíathos, en la isla griega del mismo nombre, cuenta con una pista de poco más de 1,5 kilómetros que además está construida en un terreno pegado al mar. Eso provoca que los aviones que despegan y aterrizan pasen solo unos pocos metros por encima del agua.
PIXABAY / 41EXLa pista de aterrizaje del Aeropuerto Internacional Cristiano Ronaldo se extiende por el borde del mar y está expuesta a fuertes vientos. Pese a que se amplió su longitud, las maniobras de aproximación a la misma siguen siendo muy complicadas. (Foto: Wikimedia Commons / ComunicaoZagope).
WIKIMEDIA COMMONS / COMUNICAOZAGOPEPara llegar al Aeropuerto Internacional Toncontín de la capital hondureña, los aviones deben atravesar un terreno montañoso, después realizar un giro brusco y, por último, hacer un descenso pronunciado. La pista de poco más de 2 kilómetros complica aún más la operación. (Foto: Wikimedia Commons / Óscar Josué Elvir Vásquez).
WIKIMEDIA COMMONS / ÓSCAR JOSUÉ ELVIR VÁSQUEZEl Aeropuerto Tenzing-Hillary está considerado como la puerta de entrada al Everest, por lo que se encuentra rodeado de montañas a unos 3.000 metros de altura. Su pista de aterrizaje es de apenas 500 metros y un solo sentido. Además, cuenta con una infraestructura mínima.
PIXABAY / MAGICHIMALAYADe apenas 400 metros es la pista del Aeropuerto Juancho E. Yrausquin, que se encuentra en la isla caribeña de Saba, perteneciente a Países Bajos. Además, se sitúa en una diminuta península y está rodeada por montañas y acantilados. (Foto: Wikimedia Commons / Md2b).
WIIKIMEDIA COMMONS / MD2BLa pista de aterrizaje del Aeropuerto de Gibraltar cruza una carretera urbana, la Avenida Winston Churchill. Cuando un avión despega o llega, el tráfico en esta calle se interrumpe por razones obvias de seguridad. (Foto: Wikimedia Commons / Harry Mitchell).
WIKIMEDIA COMMONS / HARRY MITCHELLEl Aeropuerto Internacional de Paro, en Bután, está situado en un valle entre picos de más de 5.000 metros de altura y rodeado de bosques. Por ello, los vuelos solo se encuentran permitidos durante el día. (Foto: Wikimedia Commons / Douglas J. McLaughlin).
WIKIMEDIA COMMONS / DOUGLAS J. MCLAUGHLINSituado a más de 2.000 metros sobre el nivel del mar, la altura no es lo más peligroso del Altipuerto de Courchevel. Y es que su pista apenas tiene 518 metros y cuenta con una pendiente descendente del 18,5%. Por si fuera poco, los aviones tienen que volar entre los picos de los Alpes para aterrizar allí.
PIXABAY / INSIGHTPHOTOGRAPHYUbicado en la pequeña isla escocesa del mismo nombre, en el Aeropuerto de Barra no hay espacio para una pista. Por ello, los aviones aterrizan en unas franjas triangulares de arena. La ventaja es que lo pueden hacer en cualquier dirección en función del viento. (Foto: Wikimedia Commons / M J Richardson).
WIKIMEDIA COMMONS / M J RICHARDSONLos aviones que llegan al Aeropuerto Internacional Princesa Juliana de la isla caribeña de San Martín, que pertenece a Países Bajos, sobrevuelan a pocos metros de altura una playa pública. No obstante, lo que a priori puede parecer un peligro, atrae a numerosos turistas. (Foto: Wikimedia Commons / Lawrence Lansing).
WIKIMEDIA COMMONS / LAWRENCE LANSINGLos fuertes vientos imperantes en la zona son los que complican las maniobras de acercamiento o alejamiento del Aeropuerto Internacional de Wellington, en la capital neozelandesa. Además, su pista no es demasiado grande, ya que tiene 2,5 kilómetros, y el mar impide que pueda alargarse.
PIXABAY / NEL_BOTHA-NZAl encontrarse en la Antártida, las pistas del Aeródromo Ice Runway son de hielo y se llegan a hundir ligeramente en cada aterrizaje. Se trata del principal aeródromo del Programa Antártico de Estados Unidos. (Foto: Wikimedia Commons / United States Air Force).
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