La bofetada de la ruina: qué se juega Will Smith después de su acción en los Oscar
Will Smith ocupa estos días las portadas de todos los periódicos, además de ser el principal tema de conversación en cualquier reunión. Podría serlo porque el actor ganó el pasado domingo su primer Oscar coincidiendo con la tercera ocasión en la que ha sido nominado. En la película por la que ha sido galardonado, 'El método Williams', interpreta al padre de las tenistas Venus y Serena, trabajo por el que ha cobrado 40 millones de dólares. Pero no, Smith está en boca de todos por la sonora bofetada que le propinó al presentador de la gala, Chris Rock, después de que este hiciera un chiste sobre la alopecia de su mujer, Jada Pinkett. El actor se levanto de forma decidida de su asiento y, sin mediar palabra, golpeó al comediante, para asombro de los asistentes y televidentes. La agresión es un hándicap a su carrera que le puede suponer una crisis reputacional con consecuencias económicas en el futuro, pese a que cuenta con una fortuna que alcanza los 350 millones de dólares, según Forbes.
Al finalizar la gala, la Academia de Hollywood, sin mencionar directamente el incidente, condenó la acción: "La Academia no aprueba la violencia de ninguna forma". Horas más tarde, en un comunicado, la organización anunciaba una investigación formal para estudiar sanciones a Smith. El actor también mostró su arrepentimiento en su cuenta de Instagram, donde pidió disculpas a Rock y calificó su comportamiento de "inaceptable".
Nacido hace 53 años en Filadelfia, su popularidad creció exponencialmente cuando protagonizó la serie de TV 'El Príncipe de Bel Air'. Antes, Smith había alcanzado una modesta fama de rapero y debía 2,8 millones de euros a la Hacienda estadounidense. Por ello, cuando desempeñó el papel principal de este popular espacio, el 70% de su sueldo fue embargado durante las tres primeras temporadas. Gracias a su primer gran personaje, el actor se embolsó 8 millones durante las seis temporadas. Después dio el salto a la gran pantalla y demostró ser un actor de éxito. Hizo películas míticas en la historia del cine, como 'En búsqueda de la felicidad', en la que ganó 20 millones de dólares y que le catapultó a una nominación a los Oscar. También formo parte de la famosa saga de 'Men in Black', donde recibió en total 45 millones por las tres películas.
Otras de las producciones más significativas para el estadounidense son 'Hancock', con la que se embolsó hasta 20 millones de dólares y 'Yo Robot', que le proporcionó la cantidad de 28 millones. En total, unas ganancias de casi 200 millones de dólares que le han convertido en uno de los 20 artistas mejor pagados de Hollywood, según la revista Forbes. Además, en los últimos años, Will Smith ha hecho de sus redes sociales una mina de oro. Cuenta con un perfil que recauda millones de dólares a través de Instagram (60 millones de seguidores), YouTube (9,83 millones de seguidores) y TikTok (68 millones de seguidores).
Por si fuera poco, el actor cuenta con un elevado número de propiedades. Hasta ahora, la prensa americana le ha 'adjudicado' al menos nueve propiedades. Su residencia habitual se encuentra en Calabasas (California) en una finca valorada en 36,2 millones de euros. Hace poco menos de un año la pareja adquiría una nueva casa, situada muy cerca de su hogar principal, en Hidden Hills, y que está tasada en 9,6 millones de euros. La familia Smith también suma propiedades en Woodland Hills (California), Nueva York, Pensilvania, Maryland y Park City (Utah).
Todo esto sin dejar de lado su faceta de empresario. Recientemente, en 2019, fundó Westbrook Inc., una empresa formada junto a su esposa Jada. Se trata de una plataforma de entretenimiento y multimedia creada para ejecutar el contenido global de la familia Smith y su estrategia de comercio. Además, el actor se asoció con el futbolista japonés, Keisuke Honda, para fundar Dreamers VC, un fondo de capital riesgo que une inversionistas corporativos japoneses consolidados con empresas estadounidenses en etapa inicial.