Agricultura busca una fórmula de consenso para calcular los costes de producción en el campo

El Observatorio de la Cadena Alimentaria, el órgano adscrito al Ministerio de Agricultura que reúne desde los representantes de los agricultores y ganaderos hasta la distribución alimentaria, volvió a reunirse este martes presidido por el secretario general de Recursos Agrarios y Seguridad Alimentaria, Fernando Miranda. Según fuentes consultadas por este medio, los representantes del Ministerio abrieron la puerta a la búsqueda de una metodología común, un estándar, para la realización de los estudios de costes de producción. Un asunto del que se habló "genéricamente" y cuya concreción se tratará en futuras reuniones de este organismo (este año ya se han celebrado dos sesiones en febrero y la última ayer). 

Todo ello, en un contexto en que la reciente prórroga de la rebaja del IVA a alimentos de primer necesidad (pan, harina, leche, huevos, verduras, legumbres...) y del 5% al 0% en el caso del aceite de oliva, ha devuelto a la actualidad el enconado debate sobre si algún eslabón de la cadena alimentaria se estaría beneficiando de la escalada de precios de los últimos meses. Polémicas no faltan. COAG denunció la semana pasada ante la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA) a dos conocidas cadenas de supermercado, por supuestamente utilizar el pollo como "producto reclamo" en perjuicio de unas 5.000 granjas avícolas. 

Según el INE, en mayo (último dato definitivo) el 'IPC de alimentación' rondaba aún el 4,4% frente a un índice general del 3,6% (el dato adelantado de junio lo coloca en el 3,4%). Lo que contrasta con una inflación de los alimentos del 16,6%, en febrero de 2023, con un dato general del 6% en el segundo mes del año pasado. Si consideramos los alimentos frescos (frutas, carne, pescado) estima un encarecimiento del 4,6% en el quinto mes del año respecto a los 12 meses anteriores. Dentro de este grupo destaca la escalada de la fruta fresca, cuyo valor se disparó un 12,1%  mientras que, entre los alimentos elaborados (aceites, preparados de legumbres, ...), los precios subieron un 4,3%. Solo los aceites y grasas subieron un 45,5% en mayo de este año respecto al mismo mes del ejercicio anterior.  

Una reivindicación de toda la cadena alimentaria

De cualquier modo, la actualización y mejora de este tipo de análisis es desde hace tiempo una reivindicación unánime de todos los actores del sector agroalimentario. La determinación de los costes de producción es una información esencial para las relaciones contractuales entre los productores primarios, la industria transformadora y, en menor medida, la distribución alimentaria. Según la Ley 12/2013  de medidas para mejorar la Cadena Alimentaria, cuya última reforma data de diciembre de 2021, a los agricultores y ganaderos se les tiene que remunerar obligatoriamente por encima de los costes de producción. 

Desde Asaja apuntan a la conveniencia de que los estudios de costes de producción sean "una referencia real para los contratos" que agricultores y ganaderos firman con otros actores.

En este sentido, la clave de bóveda sobre la que descansa gran parte de la norma se encuentra en cómo se determinan los costos en que incurre un agricultor. Es decir, cómo imputar la mano de obra o si se incluyen otros gastos indirectos como los seguros agrarios y las amortizaciones por maquinaria. 'El diablo está en los detalles', dice el refranero popular. Las fuentes consultada ponen el acento en la expresión 'costes reales'  y reconocen que "hay mucha casuística". En este sentido, advierten que "hay costes que vienen para quedarse, que no bajan del todo". Desde Asaja, a preguntas de este medio, apuntan la conveniencia de que los estudios de costes de producción sean "una referencia real para los contratos" que agricultores y ganaderos firman con otros actores de la cadena alimentaria.

Por su parte, fuentes de la distribución, recuerdan que "no es la primera vez que se habla de actualizar este tipo de estudios" y, de por sí, en Agricultura ya se están poniendo al día en algunos de estos análisis que se vieron ralentizados por el fuerte episodio inflacionario cuyos efectos se están dejando atrás. Al respecto, el Ministerio presentó ante los miembros del Observatorio la nueva configuración de la web sobre la que destacan que será de acceso más sencillo y que incorpora los datos de las diferentes comunidades autónomas, además de estar enlazada con  organismos similares a nivel autonómico. De cualquier forma, las fuentes consultadas insisten en que todo lo que sirva "para hacer una cadena alimentaria más competitiva" será bienvenido.