Economía y finanzas

Finanzas y ahorro

Ayuno de gasto: el truco definitivo para ahorrar dinero en un mes sin esfuerzo

Encontrar un buen balance entre gastos e ingresos que nos permite tener una buena salud financiera puede parecer muy difícil, sobre con rentas bajas. Pero realmente, todo es cuestión de organizarse y adaptar los sistemas de ahorro disponibles a nuestra situación personal e individual, ya que como en todo, no se puede generalizar.

Ya conocemos el método del 50-30-20 y otros en una línea similar. Ahora, y además en forma de reto más que de organización, llega el ayuno de gasto de la asesora financiera y columnista del Washington Post, Michelle Singletary. Esta estadounidense habla en su libro 'The 21-Day Financial Fast: Your Path to Financial Peace and Freedom' del ayuno de gasto de 21 días. 

Este reto implica no tener ningún gasto durante tres semanas (o 21 días). Esto quiere decir que no podremos tomarnos un café, comprarnos ropa, hacer la compra... Sean actividades esenciales o no. El único pago permitido es el de los recibos del banco si llega alguno. 

Si este tipo de ayuno de gasto nos resulta, por nuestro estilo de vida o nuestras necesidades, demasiado estricto, hay varias variantes más sutiles que pueden aplicarse. 

Diferentes tipos de ayuno económico

Por ejemplo, está el reto de la semana. Durante una semana hay que aplicar esta lógica de ayuno pero sí pudiendo pagar facturas o necesidades básicas (como la compra de alimentos de primera necesidad. La intención de esta técnica es identificar los gastos innecesarios o caprichos, como pedir comida a domicilio si tenemos en la nevera o salir a cenar. Igualmente, compra ropa en exceso cuando no la necesitamos.

También podemos endurecer este reto y, durante esta semana de ayuno, no gastar nada de nada. Buscar planes gratis, como paseos, visitar monumentos... son algunas de las opciones, además de evitar ir a la compra o pagar recibos (a no ser que sean inamovibles). Para aquellos que, sin embargo, es el fin de semana cuando gastan más, se puede incorporar una vez al mes un fin de semana sin gastos en el que estás actividades también son bienvenidas.

Por último, podemos aplicar esta norma en 24 horas sin gasto que se repitan cada semana. Aunque no sea un método muy estricto, nos permitirá darnos cuenta de lo que gastamos a diario y dónde podemos recortar para ahorrar. 

loading...