Bank of America descarta la recesión en España pese a la incertidumbre global
"España evitará una recesión técnica", así de rotundos se muestran los analistas de Bank of America (BofA) en uno de los últimos informes publicado por el que es el segundo mayor holding bancario de Estados Unidos. Pese al contexto complejo a nivel global, en plena crisis energética agravada por la guerra de Ucrania, a pesar de la inflación galopante en Europa (en España cerró agosto en el 10,4%, según datos del Instituto Nacional de Estadística), de la subida de tipos prevista para frenarla y con las cadenas de suministros tocadas aún a nivel mundial, desde la firma constatan que el segundo trimestre fue más fuerte de lo esperado y prevén un "tercer trimestre decente".
En concreto, sus estimaciones contemplan que el PIB avance este año un 4,4% para 2022 (una décima por encima del cálculo que hace el Ministerio encabezado por Nadia Calviño), que la actividad se desinfle al 0,7% el año que viene y que en 2024 recupere algo de tracción para crecer al 1,8%. Desde BofA apuntan que el último tramo de la normalización, sobre todo después de lo que parece haber sido una muy buena temporada turística, "está ayudando en la parte media del año". Eso será lo que evitará que el país entre en una recesión técnica, es decir, que acumule dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo.
Con todo, en la entidad se muestran prudentes a causa de las tensiones en el plano energético. Así y, pese a que nuestro país evitará el racionamiento dada la menor dependencia del gas ruso, el shock del precio de la energía y la persistente incertidumbre del suministro pesarán sobre la actividad, "especialmente dada la alta sensibilidad de la economía española a los precios persistentemente altos de la energía". Al igual que sucederá en el resto de Europa, esta coyuntura reducirá la trayectoria de crecimiento del país hasta bien entrado el año 2024. "Esta mayor sensibilidad se refleja en parte en nuestra previsión de inflación para España, que se sitúa por encima de las de la zona euro en los próximos dos años". Calculan, en concreto, que la vida se encarezca un 9,2% en 2022 y un 5,3% en 2023, antes de bajar al 1,1% en 2024.
"Además, esperamos que las cifras fiscales mejoren muy lentamente debido a las perspectivas de crecimiento más débiles y al impacto de las medidas para amortiguar el impacto de la reducción de los ingresos reales (que suponemos que se mantendrán al menos hasta finales de 2023)". Es por ello que calculan que el déficit público se mantendrá muy por encima del umbral del 3% incluso en 2024.