PARO. CÁRITAS ALERTA DE QUE HAY MÁS HOGARES CON TODOS SUS MIEMBROS PARADOS QUE EN 2009
- Un informe de la Fundación Foessa denuncia una España de “dos velocidades”. Ninguna comunidad autónoma ha logrado reducir el número de hogares con todos sus miembros activos en paro a niveles anteriores a 2009, cuando se empezaron a notar los efectos de la crisis en la población. A ello hay que añadir que, en el caso de las familias sin ingresos habría que esperar siete años para que volviesen a alcanzar situaciones anteriores a la crisis.
Son dos de las denuncias que hizo Cáritas Española este jueves durante la presentación en Madrid del informe anual ‘Análisis y Perspectivas 2016’ de la Fundación Foessa, que este año se publica bajo el título ‘Expulsión social y recuperación económica’, y que constata las “dos velocidades” que vive la sociedad española en términos de desigualdad, pobreza y desempleo.
En palabras de Natalia Peiro, directora del Área de Comunicación, Sensibilización e Incidencia de la ONG, pese a la “ligera reducción de la pobreza y de la exclusión social y de algunos de sus componentes”, como los que muestran los datos del paro difundidos este jueves (cerca de 120.000 parados menos en mayo), el informe muestra que eso “nunca compensa la reducción de la pobreza en momentos recesivos”, y que no es por la crisis, sino “por el modelo social”.
“La fractura social sigue ensanchándose", dijo, advirtiendo del “proceso contracíclico”, que supone que la pobreza aumenta rápidamente en periodos de recesión pero en fases de crecimiento no desciende de la misma medida.
El documento explica las “dos velocidades” a las que se enfrenta la sociedad española en base a cuatro factores: el aumento de las diferencias entre las comunidades del norte y las del sur, la débil recuperación de empleo que no permite impulsar una reducción intensa de la pobreza y la desigualdad, la situación divergente en el “punto de partida” para salir de la crisis a la que se enfrentan las regiones españolas y la probabilidad de que aumente la “bolsa” de la exclusión social.
En concreto, mientras Andalucía, Extremadura, Catilla-La Mancha, la Comunidad Valenciana, Canarias y las Islas Baleares se encontrarían en peor situación para salir de la crisis; Cantabria, País Vasco, Navarra, La Rioja y Aragón estarían mejor.
ELECCIONES 26-J
Ante este panorama, Cáritas pide mayor “altura de miras” a los políticos que concurren a las elecciones del 26-J. Según Peiro, “no han sabido responder” y deben escuchar “a los ignorados” y a “los expulsados del sistema social” para combatir la “cronificación de la pobreza”.
Según recordó, aunque el número de quienes acuden a la ONG se ha estabilizado, la situación en la que están es peor, hasta el punto de alejarse de la participación política y social.
'LOS EXCLUIDOS NO VOTAN'
Según Guillermo Fernández, miembro del Comité Técnico de Foessa, “las personas excluidas no van a votar, desconectan”. Fernández recordó que el informe refleja que los ingresos de los hogares han caído “espectacularmente” desde el primer impacto de la crisis, con una reducción que supera el 10%.
En cuanto a los indicadores de desigualdad alertó del “hundimiento de las rentas más bajas”, como puede verse especialmente en comunidades como Andalucía, Asturias y Castilla-La Mancha, donde han caído las de los más pobres.
En cuanto a pobreza y exclusión social, aumenta el riesgo de pobreza en todas las comunidades y en el conjunto nacional la variación anual media es del 9% si se ancla el umbral de pobreza en 2009 (y no antes de la crisis).
Respecto a los datos de empleo, recordó que son peores que en 2009 en hogares con todos sus miembros en paro y con cuatro de cada diez desempleados de larga duración en el total de parados de 14 comunidades autónomas. Por ello, avisó que “no todas las soluciones pasan por mejorar el empleo”.
Desde su perspectiva, habría que fomentar la “pedagogía fiscal”, porque “el mantenimiento del sistema de bienestar social tiene un coste” en forma de impuestos y que lo ideal sería “un sistema progresivo fiscal” para no dejar “a nadie atrás” en la recuperación.
“La política de recortes ha funcionado para contener el déficit, pero no para las capas más desfavorecidas”, aseveró.
Por todo ello, Foessa y Cáritas reclaman ante el 26-J, varias medidas a favor de los más vulnerables, como la creación de una renta garantizada para cubrir un mínimo equivalente en toda España, lo que supondría hasta 3.600 millones de euros para ayudar a hogares sin ingresos que podrían recibir esta prestación.