El Banco de España señala que las empresas han ampliado márgenes sobre ventas en 2023, pero siguen por debajo del nivel prepandemia

El Banco de España certifica que las empresas españolas han seguido ampliando sus márgenes de beneficio sobre sus ventas en el arranque de 2023. Una mejoría impulsada casi en exclusiva por el fuerte crecimiento en el margen de las compañías energéticas y de refino de petróleo. No obstante, el conjunto de las firmas todavía no han recuperado los niveles que se registraban en el primer trimestre de 2019, la última referencia sin contaminar por la pandemia.

Así se desprende de la estadística trimestral de la Central de Balances, una base de datos que el supervisor bancario ha actualizado este lunes y que incluye información de unas 900 empresas. En su mayoría se trata de compañías de tamaño grande y mediano, pero con un peso representativo en la economía nacional. 

El informe apunta a que las empresas tuvieron en el primer trimestre de 2023 unas ganancias antes de impuestos y el pago de intereses que representaron un 9,6% de su facturación. Una cifra ocho décimas superior al 8,8% registrado en el cuarto trimestre de 2022, pero que queda todavía por debajo del 9,9% observado en el primer trimestre de 2019, la referencia anterior al covid. Esta métrica es lo que se conoce como margen de explotación. 

La mejoría en los márgenes empresariales en el arranque de 2023 viene dada casi en exclusiva por el sector de la energía y el refino de petróleo. Las compañías que realizan estas actividades ampliaron sus márgenes del 10,7 al 16,4%, un salto de casi seis puntos en un solo trimestre con escasos precedentes en la serie histórica.

Sin embargo, en prácticamente el resto de sectores de actividad, los márgenes se redujeron en el primer trimestre en comparación con el final de 2022. Es el caso de la industria, donde el margen de explotación se redujo un punto en el arranque del año y cayó hasta el 5,9%, todavía por debajo de su cifra prepandemia. 

Por su parte, el margen en los servicios se situó en el 7,9% también un punto por debajo del cuarto trimestre del año pasado y lejos aún del 11,8% que se observaba en el primer trimestre de 2019. En el caso del comercio y la hostelería, el margen de ganancias se redujo dos décimas hasta caer al 4,8%, también por debajo de las cifras anteriores al covid. Las empresas de transporte, con un margen del 17,4% (3,3 puntos menos) tampoco han conseguido recuperar el nivel de ganancias precovid. 

Más allá de la energía y el refino, que se han visto claramente beneficiadas por el shock en el mercado que ha supuesto la guerra en Ucrania, el único sector que amplió márgenes en el primer trimestre fue la información y las comunicaciones. En esta actividad, el margen de explotación se situó en el 20,8%, un avance de seis décimas que no es suficiente para alcanzar las cifras precovid.

En todo caso, conviene matizar que esta métrica no es perfecta. En primer lugar, porque el margen de explotación no tiene en cuenta los costes tributarios y financieros, una información que se publica de manera tan actualizada. Si estos se contabilizasen, el porcentaje de margen sería considerablemente más bajo en todos los sectores.

Además, al no tener apenas representación de empresas pequeñas, es poco representativa de la situación de las pymes. Con todo, es una métrica que se actualiza con frecuencia (cada trimestre) y que permite comparar la situación con periodos anteriores para observar la evolución de los márgenes.

El dilema de los márgenes

La medición de los márgenes de beneficio y el efecto que están teniendo sobre los precios se han convertido en una cuestión de acalorado debate en los últimos meses. Y es que, a diferencia de lo que ocurre con los salarios, los márgenes no son una variable que se pueda observar directamente. De hecho, el Banco de España emplea hasta tres métricas diferentes para aproximar su evolución, que otorgan resultados también distintos. Hasta el punto de que, si se miden los márgenes sobre el valor añadido bruto y no sobre la facturación, se observa como estos ya estarían algo por encima de las cifras prepandemia.

Esta ausencia de una medida clara e inequívoca ha dificultado alcanzar un acuerdo para limitar la ampliación de márgenes, tal y como reclamaba el Banco de España. A diferencia de lo ocurrido con los salarios, materia en la que sindicatos y patronal alcanzaron un pacto que prevé alzas importantes en los próximos años, pero sin llegar a recuperar todo el poder adquisitivo perdido.

Para solventar este vacío, el Ministerio de Economía capitaneado por Nadia Calviño, ha propuesto crear un observatorio de márgenes empresariales, una idea planteada originalmente por los sindicatos. Su lanzamiento estaba previsto inicialmente para este mes de junio y aportará información general y por sectores, pero no de compañías individuales.