Junio cerró con un fuerte acelerón en el empleo a costa de los buenos datos en la hostelería y el comercio. La afiliación a la Seguridad Social aumentó el mes pasado en 76.948 los afiliados medios, descontando el efecto estacional. Una cifra que duplica con creces los registros de mayo y abril y que medida en términos brutos (115.607 afiliados medios) es la tercera más alta para un mes de junio en los últimos 21 años. Solo en junio de 2021, el primer mes después de que decayera el estado de alarma, y en 2005, cuando se produjo una regularización masiva de migrantes, aumentó más el empleo que en 2022.
Sin embargo, la reducción en el número de parados se frenó en comparación con meses anteriores. Así, el desempleo cayó en 42.409 personas, menos de la mitad que la bajada registrada en mayo (99.592), lo que supone una cifra inferior a la media histórica y modesta para un mes en el que el paro solo ha aumentado dos veces en los últimos 20 años (2008 y 2020). De hecho, si no se tiene en cuenta el primer año pandémico, es la menor caída del paro para un mes de junio desde 2008, cuando el número de desempleados aumentó en 36.849.
La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha valorado positivamente los datos que se han conocido este lunes. "Seguimos en una tendencia descendente. Seguimos en un récord histórico de contratos indefinidos. Queda mucho por hacer, pero la tendencia se consolida y también el cambio del paradigma de la contratación. Creo que son buenas noticias", ha expresado. En la misma línea ha opinado el secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey, quien sostiene que "el mercado de trabajo se ha convertido en un factor de estabilidad", con "unos datos robustos, muy fuertes y resilientes que acreditan que hay un cambio de cultura".
Respecto al contraste entre el fuerte aumento en la afiliación y el descenso relativamente modesto en el paro, Pérez Rey ha señalado que se trata de variables que funcionan con procedimientos administrativos distintos y en la que los desajustes "no son necesariamente una anomalía". El secretario de Estado de Empleo cree que el fuerte dinamismo del empleo podría estar causando que muchas personas pasen de estar inactivas a encontrar trabajo sin necesidad de llegar a inscribirse en las listas del SEPE, por lo que sus casos no se reflejarían en la estadística.
Cinco meses seguidos de bajada de paro
La bajada del paro registrada en junio es la quinta consecutiva en lo que llevamos de año y deja la cifra total de desempleados en 2.880.582, el mínimo desde octubre de 2008. Desde diciembre del año pasado han abandonado las listas del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE), 225.323 personas. En comparación con junio del año pasado hay 733.757 parados menos (un 20,3% menos).
El paro se redujo en todas las comunidades autónomas a excepción de Andalucía, donde creció en 6.345 personas. En lo relativo a los sectores de la economía, los inscritos en el SEPE se redujeron en el sector servicios (41.017 parados menos), la industria (7.148) y la construcción (4.981), mientras que se incrementó en la agricultura (8.863).
En lo que se refiere a la creación de empleo, la Seguridad Social registraba en junio medio millón de afiliados más que en diciembre, que se elevan hasta los 848.053 adicionales si se compara con junio de 2021. En total, el departamento que dirige José Luis Escrivá contabilizaba 20.348.330 afiliados medios en junio, 1,5 millones más que en febrero de 2020, el último mes antes de que estallara la pandemia.
Buena parte de los más de 100.000 empleos netos creados en junio proceden de la hostelería, que aporta 49.337 afiliados, y el comercio, donde la afiliación creció en 30.946 afiliados. Las actividades administrativas (24.057 afiliados más) y las sanitarias (21.585) son los otros dos sectores que tiraron del carro del empleo. Por contra, la educación, donde en junio se destruyeron 47.933 puestos de trabajo tras el final del curso escolar, fue el mayor lastre para la afiliación.
Nuevo récord de indefinidos
Otro de los aspectos más destacados de los datos conocidos este lunes es que junio cerró con un nuevo récord absoluto de contratos indefinidos. De los más de 1,7 millones de contratos que se formalizaron el mes pasado, 783.595 (el 44,3%) fueron indefinidos, una cifra nunca antes alcanzada en cualquier mes.
Los contratos fijos discontinuos y a tiempo parcial supusieron seis de cada diez indefinidos firmados en junio, frente al 40% restante que fueron a tiempo completo. En concreto, el 37,3% de los indefinidos fueron fijos discontinuos, el 22,7% a tiempo parcial y el 40% restante a tiempo completo.
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