El inicio de 2024 ha traído consigo un repunte en los precios. El Instituto Nacional de Estadística (INE) ha confirmado este jueves un alza de la inflación de tres décimas en enero. El indicador ha crecido hasta el 3,4%, empujado por la subida en el IVA de la luz al 10%. Al mismo tiempo, el IPC de los alimentos también rompió su tendencia a la baja con un ligero repunte al 7,4% en el primer mes del año.
Tras despedir 2023 con una tasa interanual del 3,1% en diciembre, el ritmo de subida de los precios se aceleró en el primer mes de 2024. Se trata de la primera subida del IPC en cuatro meses. El alza distancia la inflación del objetivo del 2% al que el Banco Central Europeo (BCE) pretende devolver los precios y la encamina de nuevo al entorno del 3,5% en el que estuvo estancada en septiembre y octubre. Solo en enero los precios crecieron un 0,1% con respecto a los niveles de diciembre, aunque en términos anuales el indicador se mantiene alejado de la tasa del 5,9% en la que se situaba en enero del año pasado.
El alza de la inflación en el arranque del año se debió principalmente a la subida en el IVA de la luz, que el 1 de enero pasó del 5% al 10%. En consecuencia, según los datos publicados este miércoles por el INE, la electricidad es un 9,6% más cara que hace un año, frente al 40,8% que se abarató en enero de 2023, cuando entró en vigor el recorte fiscal para aliviar la presión sobre el bolsillo de los consumidores. Como parte de la retirada progresiva de las medidas anticrisis, el Gobierno también elevó a principios de año el impuesto eléctrico del 0,5% al 2,5%. Sin tener en cuenta las variaciones fiscales, el IPC interanual a impuestos constantes se situó en enero en el 3,2%, por debajo de la tasa general, algo que no ocurría desde junio de 2021.
Tampoco la cesta de la compra dio un respiro a los consumidores en el primer mes de 2024. La inflación de los alimentos repuntó ligeramente en enero, al registrar un leve alza de una décima en tasa interanual con respecto a diciembre. De este modo, el IPC de estos productos básicos hizo un alto en su senda de moderación emprendida tras tocar techo en febrero del año pasado al 16,6%. Es la primera vez que el indicador sube desde el mes de julio, cuando todavía superaba los dos dígitos. Pese al repunte, el dato de enero es el segundo más bajo desde principios de 2022, solo por detrás del 7,3% de diciembre.
El aceite de oliva sigue siendo el producto que más se encarece. Su precio ha crecido un 62,9% en el último año y acumula un alza del 176,5% desde enero de 2021. Le siguen los zumos de frutas y vegetales, cuyo coste se ha elevado un 21,6% desde el inicio de 2023. También el alza interanual de la carne de cerdo, la fruta y las legumbres frescas y refrigeradas, las patatas y el cacao supera el 10%. En cambio, la leche desnatada, la mantequilla, los yogures son entre un 0,2% y un 4,1% más baratos que hace un año. El precio de los aceites distintos al de oliva se ha reducido también un 25,3% desde enero de 2023.
Bajada en los carburantes
Frente al alza de la luz y de los alimentos, la evolución de los carburantes ha sido la contraria, lo que ha servido para amortiguar el repunte de la inflación. En concreto, el gas natural, el butano y el propano y los combustibles líquidos se han abaratado un 19,7%, 14,4% y 13,1% respectivamente desde enero de 2023. Del mismo modo, el precio del gasóleo ha bajado un 7,5% y el de la gasolina, un 1,7% en el último año.
De hecho, al excluir del cálculo el precio de la energía y de los alimentos no elaborados -dada su alta volatilidad-, la inflación subyacente continuó en enero su senda descendente por sexto mes consecutivo. Este indicador se moderó dos décimas hasta situarse en una tasa interanual del 3,6%, su nivel más bajo desde marzo de 2022. La brecha entre el índice general y la subyacente es la menor desde noviembre de 2022.
Las previsiones para 2024 apuntan a que la inflación se mantendrá este año en un nivel cercano al registrado en enero. La Comisión Europea ha revisado a la baja este jueves su pronóstico, apuntando a que los precios crecerán un 3,2% este año. En esa misma línea, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) estima que el alza será del 3,3%, después de recortar su estimación el mes pasado por la moderación de los precios observada en la recta final de 2023 y la prórroga parcial de algunas de las medidas anticrisis.
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