Economía

España creció en el tercer trimestre al 0,1%, una décima menos de lo que se había previsto

La economía española frenó su crecimiento en el tercer trimestre del año casi dos puntos, registrando una tasa del 0,1%, una décima menos de lo previsto y muy por debajo del 2% del trimestre anterior, según los datos de Contabilidad Nacional publicados este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Los motivos de esta desaceleración fueron principalmente la caída de la inversión y la moderación del consumo de los hogares.

El crecimiento del PIB entre los meses de julio y septiembre fue finalmente una décima menor al dato avanzado por el INE a finales de octubre, en el que se estimaba un avance trimestral del 0,2% respecto a los tres meses anteriores. Sin embargo, la tasa interanual se ha revisado seis décimas al alza hasta situarse en un 4,4%, más de dos puntos por debajo aun así del 7,6% del segundo trimestre del año. Estas variaciones respecto al avance de octubre se deben a que por aquel entonces la mayoría de indicadores estadísticos sobre la evolución económica estaban disponibles hasta agosto.

"Los datos conocidos hoy del PIB durante los tres primeros meses del año apuntan a un crecimiento claramente superior al previsto por el Gobierno y por el resto de organismos y analistas", ha valorado este viernes la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño. "La economía española se mantiene en una senda de fuerte recuperación iniciada en 2021 y está resistiendo bien incluso en un contexto internacional tan complejo. La revisión al alza se debe a un comportamiento mejor del previsto tanto del consumo como de las exportaciones", ha añadido.

El freno en el crecimiento del PIB se debe en buena medida a la desaceleración del consumo de los hogares, que solo creció entre julio y septiembre un 0,1%, más de punto y medio por debajo del 1,7% del trimestre anterior, y a la caída de la inversión, que bajó un 0,1%, frente al avance del 2,9% registrado entre abril y junio. Pese al estancamiento, la demanda nacional aportó 0,5 puntos al PIB, lo que sostuvo el tímido crecimiento de la economía española, ya que la demanda exterior restó 0,4 puntos por las dificultades de las ventas al exterior.

Por un lado, la caída del consumo de los hogares coincide con los meses de inflación más alta. En julio, los precios tocaron techo con un encarecimiento del 10,8% respecto al año anterior, el dato más elevado de la serie histórica. Los dos meses siguientes el IPC emprendió la senda de la moderación, pero se mantuvo en niveles del 10,5% en agosto y el 8,9% en septiembre.

Por otro lado, la inversión registró finalmente peores datos de los esperados. En el sector empresarial se contrajo un 0,2%, frente a la recuperación del 1,3% que había avanzado el INE en octubre, mientras que en el ámbito de la vivienda, la edificación y la construcción cayó un 0,6%, frente al 0,1% previsto.

Por el contrario, tras nueve meses consecutivos de descensos, el gasto público creció en el tercer trimestre un 1,4%, mientras que el consumo de las instituciones sin fines de lucro avanzó cuatro décimas hasta situarse en un 0,9%. Todo ello contribuyó a elevar el PIB a precios corrientes hasta los 332.044 millones de euros, el más alto de la serie histórica.

Por sectores de actividad, la agricultura fue el que más creció en los meses de verano a un ritmo del 0,7% trimestral, al igual que el comercio, el transporte y la hostelería, que avanzó por encima del conjunto del sector servicios (0,2%). Por su parte, la industria se contrajo un 0,1%, pese al avance de la manufacturera (0,5%). Destacan los retrocesos del 3% y el 1,8% trimestrales de la actividad inmobiliaria y el sector financiero y de seguros, respectivamente.

El empleo también frena

Por su parte, el empleo creció en el tercer trimestre un 2,9% interanual en términos de Contabilidad Nacional, lo que supone un aumento de 540.000 puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo en un año. Se trata de una tasa 2,3 puntos inferior a la del trimestre anterior, mientras que las horas efectivas experimentaron un incremento similar, por encima del 3%. Sin embargo, la productividad avanzó a menor ritmo, con un crecimiento del 1,5%, ocho décimas menor al del trimestre anterior.

También el número de asalariados y la remuneración crecieron a menor ritmo que el trimestre anterior. En términos interanuales, el volumen de trabajadores se incrementó un 3% entre julio y septiembre, frente al 5,8% del trimestre anterior, mientras que la remuneración lo hizo un 5,3%, 2,4 puntos por debajo del dato de los tres meses anteriores, y la remuneración media, un 2,2%.

Redactora '20minutos'

Graduada en Periodismo y Ciencia Política por la Universidad Rey Juan Carlos. En 20minutos desde 2022, primero en la sección de Última Hora y actualmente en Nacional. Escribo sobre todo de economía, aunque también he cubierto la actualidad política.