Los países de la eurozona se enfrentan a una compleja situación de incertidumbre económica como consecuencia del conflicto en Ucrania, del aumento de los precios de la energía y de la inflación, que continúa disparada. El propio vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, subrayó hace apenas unos días que es posible que en los próximos trimestres la zona euro entre en recesión técnica.
"Creemos que es posible, pero esta situación no supondría una recesión excesivamente intensa", destacaba en un evento del Consejo General de Economistas de España (CGE) en declaraciones recogidas por Europa Press. Finalmente, el BCE ha subido los tipos 0,75 puntos más, hasta situarse en el 2%, su nivel más elevado desde 2009.
El objetivo es frenar una posible recesión en Europa. De hecho, el Consejo de Gobierno del BCE ha asegurado que prevé seguir subiendo los tipos de interés hasta que la inflación baje al 2%.
El poder adquisitivo, restringido por la inflación
La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) también considera que la economía española podría entrar en recesión técnica entre finales de este año y comienzos de 2023. Esto quiere decir que encadenaría dos trimestres consecutivos con caídas del Producto Interior Bruto (PIB) en términos interanuales.
La recesión se vincula directamente con el contexto actual, ya que la inflación restringe el poder adquisitivo de los consumidores. No obstante, una crisis económica se relaciona con un periodo de inestabilidad a todos los niveles durante un tiempo prolongado.
Desde la Airef han asegurado que el deterioro de la economía en Europa "está siendo muy intenso y eso puede llevar a revaluar la magnitud de la caída". Además, han subrayado que la mayoría de los organismos de análisis prevén contracciones del PIB en Alemania o Italia en 2023, un escenario en el que "va a ser muy difícil que España evite una caída del PIB en uno o dos trimestres".
Qué se tiene en cuenta para hablar de recesión
No obstante, la directora de análisis económico del organismo, Esther Gordo, ha matizado cuáles serán las implicaciones de una recesión técnica sobre la economía española. "La definición de recesión técnica son dos trimestres seguidos negativos. Nosotros tenemos nuestras dudas de que esto implique una recesión", ha detallado, recordando el caso estadounidense, donde los criterios para declarar una recesión van más allá de dos trimestres consecutivos en negativo y tienen en cuenta otras variables como el desempleo.
La Fundación de Cajas de Ahorros (Funcas) ha aumentado en tres décimas sus previsiones de crecimiento económico de España en 2022, hasta el 4,5%, pero ha recortado 1,3 puntos sus estimaciones para 2023, hasta el 0,7%.
Desde Funcas también estiman que en el último trimestre de 2022 y el primero de 2022, es posible que se produzca un decrecimiento del PIB, generando una recesión técnica. En concreto, prevé que el PIB caería un 0,4% en el cuarto trimestre de 2022 y otro 0,4% en el primero de 2023.
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