CaixaBank da por archivado el asunto Villarejo tras la imputación de febrero

CaixaBank confía en que saldrá airosa de la investigación del caso 'Tándem' en la que hace poco más de tres semanas fue imputada de nuevo como persona jurídica. La Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional reabrió la causa al determinar que el juez Manuel García Castellón tomó una decisión prematura al dar 'carpetazo' a las actuaciones, estimando los recursos para volver a abrir la pieza separada número 21 de la macrocausa presentados por la Fiscalía, la acusación popular ejercida por Podemos y la acusación particular del expresidente de Sacyr, Luis del Rivero, personado como perjudicado de los presuntos espionajes encargados al excomisario Villarejo.

El banco presidido por José Ignacio Goirigolzarri ha querido dejar claro al mercado que no prevé ningún impacto en relación al caso por el que se ha determinado la necesidad de practicar más diligencias tendentes a fin de esclarecer la presunta comisión de delitos de cohecho y revelación de secretos. "Se estima que este estudio más amplio solicitado por la Sala llevará a que se dicte una nueva resolución de sobreseimiento", asegura CaixaBank en el informe anual financiero remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en el que debe plasmar los riesgos fundamentales a los que se enfrenta el grupo en el medio y largo plazo. 

A principios del pasado verano, el Juzgado resolvió citar en calidad de investigada a CaixaBank, junto al presidente de su Fundación, Isidro Fainé, convocándola a ser oída en declaración para obtener conocimiento de las medidas implantadas en sus planes de cumplimiento para prevenir delitos o reducir de forma significativa el riesgo de su comisión. Pocos días después -29 de julio de 2021- se publicó un auto en el que se acordaba el archivo de la causa seguida contra el banco, si bien pasados unos seis meses -7 de febrero de 2022- la resolución fue revocada por la Sala de lo Penal al entender necesario practicar ulteriores diligencias.

El titular del Juzgado busca ahora hueco en su agenda para tomar declaración como testigo a la directiva que supuestamente se encargó de verificar que se cumplieron todas las normas en la relación comercial entablada en 2011 con el Grupo Cenyt, la empresa del agente encubierto. Ella es la responsable de Auditoría Interna de CaixaBank, María Luisa Retamosa. Esta pieza se investiga junto a Repsol, del que el banco era el principal accionista, por lo que también se tomará la testifical de Enrique Hernández, el 'compliance officer' de la energética y responsable de controlar que la empresa cumple con los requisitos legales y políticas internas con sus actividades. 

CaixaBank descarta cualquier riesgo patrimonial, pero reconoce el impacto reputacional de un caso con alto grado de escrutinio público

En consecuencia de su esperado archivo, CaixaBank descarta rotundamente que la investigación en curso ante el Juzgado de Instrucción Central número 6 vaya a provocar alguna afectación en sus cuentas o, en definitiva, que acabe materializándose algún riesgo patrimonial vinculado a este procedimiento penal. No obstante, sí que es consciente del alto grado de seguimiento público que se realiza a este polémico caso y del daño reputacional que implica, asunto que el sector bancario analiza muy detenidamente. La opinión negativa sobre la industria financiera es también una cuestión que ocupa a los principales supervisores como el Banco de España o la CNMV al ser crucial para la estabilidad, más si cabe cuando se trata de empresas cotizadas del Ibex 35. 

A ninguna institución se le escapa que mantener una buena reputación empresarial es crucial y para ello convendría que las investigaciones se realizaran con gran profundidad pero con la mayor celeridad posible. En otra de las piezas de la causa se investiga a BBVA, si bien su caso es más incierto, y su propio primer ejecutivo, Carlos Torres, urgió recientemente a la Justicia a cerrar la instrucción de Cenyt sin más dilación asegurando que las distintas prórrogas se vuelven "cansinas". El banco con sede en La Vela admitió en 2019 que este escándalo afectaba a su imagen debido a las sucesivas noticias, aunque negaba impacto directo en el negocio.

En suma, la reputación y la celeridad por resolver tramas controvertidas son aspectos críticos. El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, así como la subgobernadora, Margarita Delgado, lo han repetido en numerosas ocasiones. Desde el supervisor de los mercados que dirige Rodrigo Buenaventura el mandato ha ido siempre en la misma dirección. La reputación y, en general, la conducta en los negocios, son los pilares sobre los que se basan el comercio y las transacciones financieras desde sus inicios. La número dos de la CNMV, Montserrat Martínez Parera, ya lo dijo una vez: “una mala reputación es una carga, ligera de levantar, pesada de llevar, difícil de descargar”.