Carceller repatria a España la sociedad familiar con la que chocó con Hacienda
Regreso a España. La familia Carceller ha decidido finalmente acometer la repatriación de su sociedad Financiera Intercontinental, radicada en Panamá, y trasladar su domicilio social a nuestro país, en concreto a la provincia de Barcelona. Además, de paso, ha cambiado su nombre a 'Mirambel Patrimonial'. Estará presidida por Lourdes Carceller Arce y cuenta como consejeros con sus tres hermanos -Demetrio, José y María-, según comunicado la propia firma al Registro Mercantil.
La repatriación de Financiera Intercontinental pone fin a uno de los grandes quebraderos de cabeza de la familia, ya que la sociedad estuvo en el corazón de los problemas que tuvo con Hacienda. En 2016, tras un proceso que arrancó en 2009, Demetrio Carceller Coll y su hijo, Demetrio Carceller Arce, llegaban a un pacto con Anticorrupción en la Audiencia Nacional para evitar su entrada en prisión. Eso sí, pagaban una multa de 93 millones de euros por incurrir en fraude fiscal. Además, eludieron el otro cargo que se les imputaba, el de blanqueo de capitales, aunque el patriarca fue condenado como autor de 13 delitos contra la Hacienda Pública y su hijo como 'cooperador necesario' en cuatro de ellos.
La familia Carceller Arce es una de las mayores fortunas de nuestro país, figurando dentro de la lista Forbes de los 100 más ricos de España. Un patrimonio levantado gracias a su participación en multitud de empresas, entre las que destacan Damm, Disa, Ebro Foods o Sacyr, entre otras. El propio Demetrio Carceller Arce, ahora al frente del negocio familiar, es presidente de la petrolera Disa y del grupo cervecero Damm, cargos que compatibiliza con el de vicepresidente de Ebro Foods (ostenta el 11,686% del capital) y de la constructora del Mercado Continuo.
Su patrimonio bursátil, pese a ser uno de los 'top' de nuestro país, se ha resentido este año. Lo ha hecho debido a la fuerte caída que han sufrido los mercados durante este ejercicio como consecuencia del impacto de la Covid-19. El valor de su participación en Ebro Foods apenas ha variado ya que el grupo de alimentación se comporta plano en bolsa en 2020... pero Sacyr sufre un desplome cercano al 25%, superior al descenso de la bolsa española tras el 'sprint' de los últimos días. La constructora presidida por Manuel Manrique acusó en el parqué el laudo desfavorable sobre el Canal de Panamá que le obligó al pago de 84 millones de euros y que provocó un golpe en bolsa del 20,02% a finales de septiembre.
Aumentó su peso en Sacyr
El propio Demetrio Carceller se reforzó en Sacyr antes de dicho varapalo. Lo hizo tras el rally en bolsa que experimentó la constructora y compró 65.000 títulos por los que desembolsó 128.978,57 euros. Lo hizo a un precio ligeramente por debajo de los dos euros por acción (1,98 y 1,99 euros) y ahora cotiza sobre los 1,88 euros. Además, estas adquisiciones se produjeron tres meses después de hacer más compras en la constructora. Durante el verano adquirió otros 38.369 títulos más y su participación, tras estos movimientos, se elevó hasta el 12,593% del capital. Este porcentaje le convierte (sin el pacto de sindicación) en su segundo mayor accionista tras Corporación Financiera Alba, que tiene un 14,004%.
Su presencia en la constructora es relevante no solo porque ostente el cargo de vicepresidente sino porque la petrolera canaria Disa ha extendido en noviembre diez años más su pacto de sindicación con el grupo Satocán (del empresario Juan Miguel Sanjuan) en Sacyr, en la que controlan de forma conjunta un 14,6% del capital, según informaron a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Así, podrán "hacer los mayores esfuerzos" a fin de que Satocán o la persona que designe la empresa canaria mantenga o renueve su condición de vocal del consejo de administración.