Ifema recupera las ferias presenciales para prepararse ante el regreso de Fitur
Vuelven las ferias presenciales al mayor centro de convenciones de España. Ifema reanudará su actividad habitual previa a la pandemia el próximo 22 de marzo, cuando celebrará el HIP-Hospitality Innovation Planet. Un evento que será el que dé el pistoletazo de salida de una preparación que tiene como fin que Feria de Madrid se prepara para su gran objetivo: poder organizar con la mayor normalidad posible y con todas las medidas de seguridad Fitur. Un camino hacia la mayor feria de turismo de Europa que será el primer gran acto empresarial de Europa, según señalan los responsables de Ifema. Y que significará que por primera vez en más de un año habrá una gran movilidad internacional hacia España para todos los profesionales y expositores que quieran participar en la misma.
El regreso de Fitur está previsto para mayo, por lo que la empresa tiene dos meses por delante para prepararse con la celebración de otras ferias que combinarán actividad presencial y virtual. Así lo ha señalado el presidente ejecutivo de Ifema, José Vicente de los Mozos, que ha insistido en destacar en que el evento turístico será "la primera feria internacional que se celebrará en Europa". Su celebración también contará con el respaldo del Gobierno central, después de que el Consejo de Ministros la declarara como de interés público hasta 2023. Lo que supone que contará con una deducción fiscal que será beneficiosa para Feria de Madrid, según ha recordado De los Mozos.
La celebración presencial estará marcada por las medidas de seguridad. Y de su éxito, según los responsables de la firma, dependerá en parte que la campaña turística de verano pueda tener el éxito al que se aspira para una reactivación considerable de la economía. Lo primero que se exigirá a todo el que quiera pasar por las naves de la feria será una PCR negativa que se haya realizado con un máximo de 72 horas de antelación. Tras ese requisito, el siguiente será la realización de un test de antígenos para todos los presentes. Estos se llevarán a cabo en una de las naves, que se dedicará exclusivamente para que todo el que acuda se someta al test. La duda es si serán gratuitos o si los visitantes tendrán que costearlos de su bolsillo. Algo que la empresa aún está pensando, como han admitido.
Entre los cambios de protocolos que llevaran a cabo para evitar contagios estará el cambio de las entradas. Ninguna de ellas será de papel en esta nueva etapa marcada por la Covid. Por lo que toda acreditación o distintivo será digital y se controlará a través de una aplicación. Un formato tecnológico que también se utilizará para controlar los aforos. Para lo que habrá un conteo digital que permitirá saber cuántas personas están presentes en cada recinto de Feria de Madrid. Si se excediera el límite, se tomarían las medidas oportunas, ya que "vamos a ser muy estrictos", han apuntado desde la empresa. Además, se continuará con los protocolos de limpieza ya establecidos y en eventos gastronómicos solo habrá cubiertos desechables, descartando así la limpieza constante de los mismos.
Para poder sacar adelante unos actos de este tipo, la empresa tendrá que contar con el hándicap del ERTE que decidió aplicar al 100% de su plantilla hace un mes. Según ha desvelado De los Mozos, para ello ya han elaborado un plan de "desescalada" que han comunicado al Comité de Empresa. Esto supone que este mismo mes sacarán a 40 empleados del expediente temporal para que puedan ayudar a preparar el calendario de marzo. En abril se ampliará ese número de trabajadores que se reincorporan a su actividad. Y desde el 4 de mayo, la compañía tiene previsto que toda la plantilla regrese a sus puestos. Unas previsiones que están sujetas a la evolución de la pandemia. Pero que parten de que la totalidad de los empleados desempeñen su labor con normalidad para cuando se celebre Ifema.
Lo llamativo de esta situación es que el comienzo del fin de ese ERTE va a ejecutarse cuando apenas ha pasado un mes de su aplicación. Algo que De los Mozos ha justificado con la situación "cambiante" de la pandemia, que en enero provocó las cifras más altas de contagios y de fallecidos desde que comenzó la crisis sanitaria. "La facturación en enero fue de 100.000 euros. Teníamos que garantizar la viabilidad de la compañía, y entonces no sabíamos que la desescalada que vivimos iba a ser como está siendo ahora. Y hemos sido los últimos en aplicar una medida de este tipo", ha reivindicado el presidente Ejecutivo, que ha recordado que todos sus planes son previsiones que pueden variar en función de la evolución del virus y de sus variantes.