Nokia también abandona Rusia y hará frente a un impacto de 100 millones

Nokia  acaba de anunciar su marcha de Rusia y pasa a formar parte ya de una larga lista de multinacionales que han decidido abandonar el país después de la invasión rusa a Ucrania. Tal decisión hará que la compañía tenga que hacer frente a un impacto de unos 100 millones de euros.  La empresa multinacional de telecomunicaciones y tecnología con sede en Finlandia durante estas últimas semanas había suspendido las entregas, detenido nuevos negocios y trasladado sus actividades de I+D fuera de Rusia.

El mercado soviético representó en 2021 menos del 2% de las ventas netas de Nokia, por lo que no espera que su salida del mercado  afecte a su capacidad de cumplir sus previsiones para 2022 debido a la fuerte demanda en otras regiones. "A medida que salgamos, nuestro objetivo será brindar el soporte necesario para mantener las redes y estamos solicitando las licencias pertinentes para habilitar este soporte en cumplimiento de las sanciones actuales", ha añadido la empresa finlandesa.

La salida de Nokia del mercado ruso se suma a la retirada anunciada este lunes por el fabricante sueco de redes y equipos de telecomunicaciones Ericsson, que anunció la suspensión "indefinida" de su negocio en el país, lo que llevará a la empresa a provisionar 900 millones de coronas (87 millones de euros) en el primer trimestre.

Las sanciones económicas impuestas a Rusia por la Unión Europea o Estados Unidos han desencadenado un efecto dominó y desde el comienzo del conflicto las noticias sobre compañías que deciden suspender toda la actividad en el mercado soviético son habituales. Lo que comenzó con el cierre de tiendas como fue el caso de Inditex o Starbucks ha finalizado con el abandono completo de toda actividad desarrollada en el país. Un mazazo también para muchas personas que han perdido su puesto de trabajo, ante lo que algunas compañías, como es el caso de Ericsson anunció que tendrán una baja remunerada.