Un compuesto presente de manera natural en las aceitunas y el aceite de oliva podría ayudar a combatir la obeesidad y la diabetes, de modo similar a fármacos como el Ozempic.
Una sustancia que se encuentra de manera natural en alimentos como las aceitunas o el aceite de oliva podría ayudar a combatir la obesidad y la diabetes, de modo similar a fármacos como el Ozempic.

Boticaria García en una imagen de archivo.
La experta en nutrición y divulgadora ha analizado los aceites más usados en las cocinas de España. Mientras que uno nace de las aceitunas, el otro lo hace del prensado de las semillas de girasol. Su principal diferencia es que en el de oliva abundan los ácidos grasos monoinsaturados y en el de girasol los poliinsaturados.

El aceite d eoliva, tanto ingerido como por vía tópica, tiene beneficios sobre la salud capilar.
El consumo habitual de aceite de oliva en nuestra dieta, así como su aplicación vía tópica en diferentes formulaciones, tiene demostrados efectos beneficiosos en el cuero cabelludo y la calidad del pelo. ¿Responsables? Los fitoesteroles.
Comer sano puede reducir el riesgo de tener demencia en el futuro.
Aunque no existen fórmulas mágicas para frenar el envejecimiento prematuro, sí hay una serie de premisas en las que coinciden los profesionales de la salud. Hoy nos detenemos en el 'plato de la longevidad' del doctor Jorge Soto, y en los consejos de la dermatóloga Ana Molina.

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