La idea surgió de una iniciativa popular lanzada en Facebook, después de que Breivik hablara del "lavado de cerebro" que, según él, se practica en Noruega.
El ultraderechista está siendo juzgado por la matanza de julio de 2011.
Un experto en explosivos revela que la bomba usada por Breivik tenía una potencia equivalente a entre 400 y 700 kilos de trinitrolueno (TNT).
El guardia de seguridad Tor Inge Kristoffersen, ha definido como "zona de guerra" esa área del centro de la capital noruega tras el atentado.
Durante la séptima jornada del juicio, cuya duración prevista es de diez semanas, se vieron imágenes de los daños causados por la bomba en el centro de Oslo.
El responsable de la muerte de 77 personas en Oslo y Utøya se niega a expandir su disculpa al resto de víctimas.
Se refería a un viandante muerto en la explosión de la zona ministerial de Oslo.
Reiteró que 44 de los 69 muertos en Utøya tenían "puestos de responsabilidad" en las Juventudes Laboristas, lo que les convertía en "objetivos legítimos".