El Consejo de Ministros y el Congreso deberán dar luz verde al movimiento, que supondrá la movilización de 600 nuevos militares de EE UU en la base naval.
Ambos líderes señalan la "buena relación" que une a los dos países y actualizan el tratado firmado por EE UU y España en 2001, cuando gobernaban Bush y Aznar.