El magistrado califica de "arbitraria y caprichosa" la decisión del presidente de acabar con el DACA, del que dependen unos 690.000 jóvenes indocumentados.
Determina que se reactive parcialmente hasta que se resuelvan los recursos.
El presidente ha enviado al Congreso su plan para una reforma migratoria.
Condiciona la negociación sobre los 'dreamers' a endurecer las medidas contra los menores no acompañados que llegan al país, la mayoría centroamericanos.
Propone también un sistema de concesión de visas basado en el mérito y contratar más agentes para vigilar la frontera.
Vuelve a pedir la construcción "completa" del muro con México.
La suspensión de este programa será efectiva dentro de seis meses para forzar así al Congreso a encontrar una alternativa para regularizar esta situación.
Fue un plan promulgado por Obama en 2012 y gracias a él unos 800.000 jóvenes indocumentados han podido frenar su expulsión de EE UU.
Tres cuartas partes de sus beneficiarios tienen nacionalidad mexicana.