En España, hasta un 37% de las mujeres no cumple con las recomendaciones de la OMS para mantenerse activas y poder prevenir la pérdida muscular que no está exenta de consecuencias.
La pérdida de olfato es un proceso que se produce de manera habitual con la edad, sobre todo por encima de los 60 años. Ahora, algunos estudios han encontrado que podría relacionarse con las probabilidades de padecer ciertas enfermedades.
Diferentes tipos de ejercicio tienen efectos distintos sobre nuestros tejidos nerviosos. Por ello, y atendiendo también a otros aspectos como su salud cardiovascular o articular, las personas mayores deben elegir cuidadosamente sus entrenamientos.