Científicos australianos defienden que una campaña agresiva de sacrificio de koalas ayudaría a combatir la clamidia que les causa infertilidad.
"Tratar a aquellos que están moderadamente enfermos y matar a los que están graves provocará un aumento de esta población", afirmaron los investigadores.
Tyson se negó a posar junto a un koala, porque había visto anteriormente en televisión "cómo los animales buenos se vuelven malos" y "tienen bacterias".
El ex boxeador, recordado por arrancarle de un bocado una oreja a un rival, está de gira por Australia para hablar de su vida y su carrera.