El hallazgo se produjo mientras se realizaban labores de mantenimiento en la capilla de San Nicolás y Ihesu Verde, que se encuentra adosada al muro oriental.
El relieve apareció en el reverso de la losa que cerraba la cripta situada en el subsuelo de la capilla.
La placa de mármol blanco de Carrara de estilo visigodo mide 87 por 67 centímetros y tiene un grosor de 7,5 centímetros.