Investigadores del Hospital Clínic de Barcelona y científicos internacionales han demostrado la eficacia de un nuevo dispositivo formado por un marcapasos y un desfibrilador que se comunican entre ellos por radiofrecuencia, sin cables, lo que evita las infecciones a las personas que padecen problemas cardíacos.
Aunque estamos familiarizados con las altas tasas de mortalidad de las enfermedades cardiovasculares, no lo estamos tanto con aquellas que pueden provocar la muerte súbita en la población más joven.
Se trata de una canalopatía eléctrica pura, causante de hasta un 20% de las muertes súbitas. Los aspectos genéticos, celulares y moleculares juegan un papel fundamental en el diagnóstico precoz.
La mujer de 64 años permaneció en las urgencias del Hospital de Úbeda (Jaén) doce horas sola en un camilla, sin que nadie se diera cuenta de que ya había fallecido.