Ha decidido no presentarse como candidato independiente a la Presidencia de Estados Unidos.
Afirma que no quiere correr el riesgo de que una carrera con tres opciones termine por llevar a los aspirantes republicanos Trump o Cruz a la Casa Blanca.
Los resultados de los 'caucus' y las primarias colocaron a Donald Trump y a Hillary Clinton como favoritos en la carrera hacia la Casa Blanca.
Este 'supersábado' los resultados no han sido tan contundentes.
El senador demócrata Bernie Sanders se coloca como vencedor en siete estados, muy por debajo de su rival, la ex secretaria de Estado que ya lo es en doce.
Por su parte, el polémico magnate republicano ha conseguido imponerse sólo en dos de los cuatro estados: en Kentucky y Lousiana.
Su principal opositor, Ted Cruz, venció en Maine y Kansas.
Lejos de alejarse de su sueño presidencial, el extravagante republicano se consolida sobre los rivales y suma ya su tercera victoria en los caucus celebrados.
El multimillonario, eterno enemigo de los latinos y racista declarado, captó en Nevada un 45% del voto hispano republicano y casi el 46% del voto total.
El dibujo mostraba a las dos menores caricaraturizadas como micos.
"Cuando un político usa a sus hijos como apoyos políticos, como Ted Cruz recientemente, entiendo que pasan a formar parte del juego", argumentó la autora.
El editor de Opinión afirmó después que "la política de la sección editorial ha sido por lo general dejar a los niños al margen" y pidió disculpas.
El senador por Texas ha hecho oficial su intención de convertirse en el candidato republicano para las elecciones presidenciales de 2016 en Estados Unidos.
Es una de las figuras en alza del movimiento ultraconservador del Tea Party; uno de sus objetivos fundamentales es derogar la reforma sanitaria de Obama.
Quiere "restablecer la promesa (del sueño) de Estados Unidos" y la "idea revolucionaria de que nuestros derechos vienen de Dios, el Todopoderoso".