El involutario "enemigo" del coche eléctrico

Desde que comenzó la denominada "revolución eléctrica" se han nombrado una larga lista de "supuestos enemigos" del coche eléctrico, como por ejemplo: la limitada autonomía, la falta de puntos de carga, las tarifas eléctricas, la peligrosidad de su silencio, e incluso los vendedores de los concesionarios, a los que se les atribuye tener poco interés y conocimientos para la venta de estos modelos.

Pues bien, para mi uno de los principales "enemigos" de los actuales coches eléctricos, es otro vehículo eléctrico de éxito (por volumen de ventas) que nada tiene que ver con los que en este blog analizo,  y  menos tiene como objetivo resolver los problemas globales de movilidad y calidad del aire de nuestras ciudades del futuro. Este involuntario "enemigo" no es otro que el cochecito de campo de golf, seguramente uno de los vehículos eléctricos más vendidos en todo el mundo.

Está claro que los cochecitos eléctricos de los campos de golf, no son coches, pero si que ejercen una gran influencia en las personas, ya que muchas  asocian un coche eléctrico con el cochecito de golf, un artefacto de aspecto peculiar, lento y que sirve para pasearse de un hoyo a otro.  El lado positivo seria que este tipo de vehículos, se implantaron sustituyendo a los ruidosos vehículos de combustión para mejorar la imagen "green" de estas instalaciones, y también la concentración y placentera actividad de los practicantes de este deporte.

Para nuestras  ciudades es también necesaria una revolución como la que se produjo en los campos de golf donde no se plantea utilizar un vehículo de combustión. Aún así hay que seguir trabajando para demostrar que los coches eléctricos actuales nada tienen que ver con el cochecito de golf.