Así era el Mercedes Ponton, de los primeros coches tras la Segunda Guerra Mundial
- El Mercedes W180 era un modelo de alta gama que se fabricó entre 1953 y 1957.
- Blitzen Benz, el primer coche que consiguió alcanzar los 200 km/h de media de la historia.
Las berlinas son coches señoriales, amplios y espaciosos, que dan sensación de lujo solo con subirse a ellos. Y aunque este segmento esté de capa caída en comparación con nuevos modelos como los SUV o todocamino, no dejan de seguir siendo coches que se asocian irremediablemente al lujo al volante.
Si nos remontamos a los años posteriores a la Segunda Guerra Mundial, cuando la producción en fábricas retomaba el ritmo y ya no había que comercializar armamento y se podía dirigir el foco hacia otras industrias, el automóvil empezó a experimentar una gran época dorada gracias a las cadenas de montaje y a la necesidad de hacer los vehículos más asequibles para toda la población.
Sin embargo, incluso en este contexto se seguían produciendo modelos de alta gama para las clases más pudientes y es aquí donde entra con toda su fuerza el segmento de las berlinas, que vivió un verdadero periodo de esplendor. Uno de los modelos que más miradas atrajeron y que, por suerte, se siguen comercializando de segunda mano a día de hoy para los aficionados a los coches clásicos (solo hace falta echar un vistazo a Milanuncios, por ejemplo), fue el Mercedes W180.
Una berlina de alta gama
También conocido como Mercedes Ponton por su carrocería berlina y su figura robusta y cuadrada, este coche disfrutaba de una cilindrada de 1.767 cc y una potencia de 52 CV a 4.000 rpm, con lo que alcanzaba una velocidad máxima de 126 kilómetros por hora. El motor era de 4 cilindros, aunque experimentó cambios a lo largo de sus cortos años de producción.
Y es que solo salieron de fábrica casi 52.000 unidades del Mercedes Ponton repartidas entre los años 1953 y 1957. Su precio elevado puede ser que fuera una de las razones para dejar de producirlo, o simplemente el desarrollo natural de los nuevos modelos que, en la época, mejoraban a pasos agigantados.
Este Mercedes W180, antecesor del 180 actual, disfrutaba de una baja y ancha parrilla además de un espacioso habitáculo. También el maletero era grande, para colocar cualquier tipo de equipaje, y tenía grandes avances tecnológicos como la posibilidad de distinguir la calefacción para el conductor y para el copiloto, un detalle de alta gama en la época.